Uribe gana el Villaurrutia

 

Por su novela «Autorretrato de familia con perro», en la cual plasma gran dominio lingüístico y profundidad temática, el autor Álvaro Uribe ganó el Premio Xavier Villaurrutia de Escritores para Escritores para Obra Publicada 2014.

 El jurado, integrado por Pura López Colomé, Mario Bellatin y José de la Colina, otorgó por unanimidad el premio a Álvaro Uribe, quien recibirá el galardón el próximo 28 de abril en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes.

Así lo dio a conocer el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), instancia que convoca al premio junto con la Sociedad Alfonsina Internacional A.C. (SAI), y el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), para reconocer el trabajo literario en México.

De acuerdo con el acta, se trata de «un homenaje a la palabra, al significado plural que en ella duerme y sólo despierta en el estilo, más allá del despliegue de la realidad/irrealidad, imaginación, poderes inventivos, carros alegóricos tradicionales o modernos».

Como integrante del jurado, Mario Bellatin mencionó que es «una propuesta de autor donde hay una simbiosis muy impresionante entre el libro en sí mismo, la obra y la trayectoria de un creador de tiempo completo, un creador sin dudas».

«Nos enorgullece mucho que el volumen sea impecable, tanto técnica como temáticamente, y al mismo tiempo descubrir que el autor es alguien que ha dedicado toda su vida a la escritura», indicó el escritor.

Por su parte, Pura López Colomé mencionó que «es una especie de diario de un autor que se desdobla hacia los otros e incluso pone un testigo silencioso, en términos humanos, que es un perro que está observando todo y que finalmente es el único con capacidad de mostrar sentimientos y una profundidad increíble».

«Expresar eso, sin describir al perro mismo, sin tratar de meterse en un mundo que no es el de uno, que se desconoce, y tratar de poner en sílabas humanas el estado de indefensión y de inocencia de este testigo mudo, mudo en términos humanos, Álvaro Uribe lo logra increíblemente», añadió.

López Colomé destacó la madurez literaria del autor, pues la novela misma lo dice, «es algo cuidadísimo con un respeto por la obra literaria. Aquí hay un culto por la palabra. Se reconoce la carrera de alguien que continuará escribiendo».