Acapulco, sede de la nueva investigación agrícola y tecnológica

Coconut with jasmine

El proyecto Adesur —que busca apuntalar la investigación en los estados con menos desarrollo científico— en Guerrero promoverá estudios en cultivo de coco, agave mezcalero, mango y acuicultura, así como en diversas áreas biotecnológicas

El Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y el gobierno del estado de Guerrero depositaron, el pasado martes 20 de septiembre, 40 millones de pesos para iniciar la construcción del primer consorcio científico enfocado al desarrollo tecnológico de cuatro estados mexicanos de la región Pacífico Sur: Chiapas, Oaxaca, Guerrero y Michoacán.

El nombre de este esfuerzo es Adesur, acrónimo de Alianza Estratégica para el Desarrollo Sustentable de la Región Pacífico Sur. Su sede estará en el puerto de Acapulco.

Las primeras cinco líneas estratégicas de trabajo, seleccionadas por Adesur son: 1) sustentabilidad alimentaria; 2) turismo sustentable; 3) biotecnología agrícola, alimentaria y de bebidas; 4) alimentos funcionales y nutracéuticos, y 5) impulso a la cadena productiva del cocotero.

Se trata de un consorcio porque nace con la unión de cuatro Centros Públicos de Investigación (CPI) que tienen su matriz en otros estados de la República, pero aportarán investigadores y laboratorios: desde Yucatán se mudarán a Acapulco investigadores del Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY-Conacyt); desde Sonora se trasladarán científicos del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD-Conacyt); desde Guadalajara, se unirán expertos del Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco (Ciatej-Conacyt), y desde la Ciudad de México se incorporará personal del Centro de Investigación en Geografía y Geomática “Ing. Jorge L. Tamayo” (CentroGEO-Conacyt).

Aunque la construcción de las instalaciones en Acapulco iniciará hasta enero de 2017, en la actualidad ya hay 12 científicos que dedican 90 por ciento de su tiempo de trabajo a proyectos para Adesur, aunque todavía no se mudan al estado de Guerrero. Además, hay un conjunto total de 300 científicos, de CICY, CIAD, Ciatej y CentroGEO que apoyan indirectamente los proyectos de desarrollo para la región Pacífico Sur, explicó, en entrevista exclusiva con Crónica, el doctor Felipe Sánchez Teyer, director general del CICY y actual coordinador del consorcio.

“Hay biotecnólogos, hay biólogos moleculares, hay antropólogos y expertos en sistemas computacionales y procesamiento de imágenes. Cada uno de los centros de investigación ya tenemos líneas de investigación abiertas en cada una de sus sedes principales, de las cuales ya se han generado productos. Posteriormente esos productos serán transferidos a Guerrero y a los otros estados involucrados. Cuanto tengamos el espacio físico”, detalló Sánchez Teyer.

Cuatro de las cadenas productivas en las que se enfocarán desde el principio son la, ya referida, del cocotero, pero también las de café, mango y agave mezcalero.

Los 40 millones de pesos, depositados el pasado 20 de septiembre, se suman a la donación de un terreno de 7 mil metros cuadrados, en Acapulco, que hizo el gobierno de Guerrero y que tiene un valor de 25 millones de pesos. También los cuatro CPI que participan han invertido 2 millones de pesos en los trabajos previos de preparación del proyecto.

El director del Consejo de Ciencia, Tecnología e Innovación del Estado de Guerrero (Cocitieg), Víctor Hugo González Torres, dijo que, debido a que muchos de los investigadores ya están trabajando en proyectos en el estado se contará con instalaciones alternas desde finales de este mes de septiembre.