Diabetes podría curarse con células madre

Científicos del Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco (CIATEJ) realizan un proyecto para encontrar un método contra la diabetes a través de las células madre de origen dental.

El proceso busca utilizar las biomoléculas para potenciar la diferenciación de células madre dentales hacia células beta pancreáticas, que son las encargadas de generar la insulina en el organismo, explicó la maestra Flor Yohana Flores Hernández.

“Estamos proponiendo una terapia alternativa, que es utilizar el tratamiento de células madre diferenciadas a células beta para tratar la diabetes”, mencionó Flores Hernández en una entrevista con la Agencia Informativa del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).

La líder del proyecto indicó que las células madre de la pulpa dental tienen un costo de recuperación menor, en comparación con otros tratamientos.

“Que de un diente se puedan obtener células madre es genial, porque las adiposas requieren de un proceso quirúrgico que a lo mejor no es tan severo pero sí costoso, además de invasivo”, indicó la investigadora.

“Obtener células de médula sí es un proceso doloroso, lo cual lo hace no tan factible. Y aunque hay procedimientos para recuperar células de cordón umbilical, la cantidad que se logra recuperar es muy pequeña”, agregó.

La investigación también intenta probar la efectividad de las moléculas para que sirvan como estímulo para la diferenciación de las células troncales hacia células beta pancreáticas.

Las piezas utilizadas para la investigación son donadas por el área de cirugía maxilofacial del Hospital Civil de Guadalajara “Juan I. Menchaca”, los cuales se obtienen de los procesos cotidianos de extracción de terceros molares y supernumerarios.

Los dientes extraídos se resguardan en cadena fría para luego trasladarlos a los laboratorios del CIATEJ, donde reciben el proceso requerido que elimina bacterias y hongos mediante el uso de etanol, clorhexidina, penicilina, estreptomicina y fungizona.

Las células troncales se obtienen de la pulpa dental, se cortan de forma cuidadosa irrigando agua en el diente para evitar el calentamiento, después se retira el tejido con pinzas y se mantiene en cultivo in vitro.

Después, debe confirmarse que las células madre obtenidas sean mesenquimales y que no muestran predisposición para convertirse en otro tipo de célula, dada la falta de estímulos. Una vez que se logren diferenciar, se deberá verificar que segreguen insulina.

Este nuevo tratamiento supondría incorporar nuevas células en el organismo diferenciadas antes, hacia células beta pancreáticas con la propiedad de poder secretar insulina.

Las células beta pancreáticas deben ser capaces de sintetizar y liberar de forma controlada la insulina, en la cantidad y momento adecuado al organismo.

Por su parte, el doctor Néstor Emmanuel Díaz Martínez mencionó que el proceso de diferenciación celular asemeja lo que pasa en el desarrollo.

“Dentro del desarrollo existen factores de crecimiento. Estas moléculas se van liberando y conforme la célula se va moviendo, va recibiendo estos factores”, indicó Díaz Martínez.

“Va a recibir una cantidad diferente de esas moléculas de crecimiento y señalización. Por ejemplo, si la célula está en el techo se va a diferenciar hacia un tipo celular; si está en el piso va a ser de otro tipo; y si está en la puerta, va a ser de otro tipo”, detalló el doctor.

De acuerdo con Flores Hernández, se buscará el método ideal para diferenciar las células madre dentales hacia células beta pancreáticas, para ello se tomará en cuenta las condiciones, los factores de estimulación y la concentración de los mismos.

En la actualidad, los investigadores del CIATEJ, junto con otras instituciones, trabajan con células troncales para su uso en terapias del mal del Párkinson, Alzhéimer, regeneración de hueso, diabetes y algunos tipos de cáncer.