La noVela de Carlos y la selección

Por: Guillermo Cornejo  –   @MemoCornejo –  Universidad del Futbol y Ciencias del Deporte

Uno de los grandes sueños que tienen la mayoría de los niños que son aficionados del deporte más popular del mundo, el futbol, es el de ser jugador profesional de su equipo favorito. Posterior a esto, la próxima parada es ser ídolo nacional y vestir por primera vez la playera de la selección mexicana.  Con esto se muestran ante las vitrinas internacionales y pueden llegar a saltar a una vida de ensueño en suelo europeo.

Algunos de estos niños pensarían que pueden lograr esto hasta que debuten primero en territorio mexicano; pues bien, el caso de “Carlitos” Vela es bastante diferente.

Todos los que somos seguidores de esta gran pasión futbolera sentimos un gran orgullo de ser mexicanos, y esa es la razón por la cual recordamos hasta la fecha con tanta alegría el año 2005; donde en territorio azteca se daban a conocer algunos nombres hasta el momento completamente desconocidos para el público de aficionados. Tales nombres eran Giovanni Dos Santos, Héctor Moreno, Efraín Juárez, Éver Guzmán, y claro, el nombre de Carlos Vela. ¿Cómo iba a ser posible que un grupo de adolescentes hiciera un buen papel ante las mejores potencias del mundo futbolístico?

Al momento en que México se proclama campeón del mundo de la categoría sub-17, venciendo contundentemente a Brasil, es cuando llegamos a conocer que los dos mejores jugadores de esa selección iban a jugar en el extranjero antes que debutaran en suelo mexicano.

Todo esto lo cité para intentar comprender la forma de pensar del “bombardero” Vela, ya que por lo visto él ha probado las mieles de la victoria y la máxima satisfacción antes de poder llegar a una convocatoria con la selección mayor. Vela ha jugado ya en un equipo de Inglaterra (pasando sin pena ni gloria) y en tres diferentes equipos en España, donde el último de estos equipos (Real Sociedad) se ha hecho completamente de los servicios de este prodigio mexicano.

Un jugador con la capacidad que tiene nuestro aún joven Carlitos estaría dispuesto a seguirse mostrando a nivel internacional y así aspirar a jugar con un club de mayor envergadura, poder alcanzar algo más con la selección de su país. Eso es lo que la mayoría pensaría, sin embargo, Vela ha hecho de su situación algo fuera de lo común.

Esto empezó a llamarnos la atención desde la primera vez en que Carlos Vela se negó a una convocatoria de la selección mexicana para ir a los Juegos Olímpicos de Londres 2012 debido a que estaba negociando su pase del Arsenal a la Real Sociedad y él consideraba que era más importante definir por completo su situación laboral a asistir a uno de los torneos más importantes a nivel mundial. Hasta cierto punto se puede entender, ya que debía de definir su futuro futbolístico para que a la postre pudiera mostrarse para un posible llamado a la selección.

Posteriormente se negó a venir a unos partidos amistosos y a parte de las eliminatorias jugadas en el año 2012; la razón: no se sentía bien anímicamente (versión de Carlos). Se le cuestionó a el entonces D.T. José Manuel de la Torre y menciona que hay mejores jugadores con mejor nivel que él; aunque sale a la luz algún rumor que pone al “Chepo” y a Vela en una acalorada discusión, motivo por el cual este último queda vetado de la selección hasta nuevo aviso.

Y por último, se niega a las eliminatorias para el Mundial de Brasil 2014 en el presente año debido a que no se encontraba en su mejor momento emocionalmente; aunque, es algo contradictorio, porque se encuentra en un gran momento futbolístico, metiendo goles a diestra y siniestra con su equipo, jugando como nunca lo había hecho.

Al parecer esta no-Vela seguirá por un tiempo más y lo que sí es muy seguro es que no contaremos con él en un buen rato. Mientras Carlos siga en buen nivel se podrá dar el lujo de menospreciar o no lo que se haga en la selección, pero el problema empezará cuando llegue a bajar su nivel y entonces quiera participar en certámenes internacionales. No se le desea nada malo a nadie, al contrario, el mejor éxito para Carlos en su aventura por el viejo continente, por algo se encuentra allá y nos ha demostrado que su capacidad ha ido aumentando; sin embargo, declinar a tu selección es algo que no pasa todos los días y se puede malinterpretar la razón por la cual lo hace.