¿Quién dijo que se es viejo para soñar?

Con una gran expectativa inició la séptima temporada del proyecto llamado Microteatro que rompe con el teatro convencional al ofrecer una interacción directa con los actores mediante propuestas de no más de 15 minutos de duración, en un espacio de aproximadamente 15 metros cuadrados. El objetivo principal es abrir camino a todo tipo de escritores, desde profesionales, hasta amateurs. En esta ocasión el tema de las representaciones es “Por fantasía”.

Dentro de este marco se presenta la obra Sinfonía de un recuerdo en el ropero, escrita y dirigida por Eduardo Cortés, que incluye a un elenco de primera: Gustavo Egelhaaf, Aarón Balderi, Diego Alfonso y alternando funciones
Alejandra Bogue y Bricia Orozco.

Tuvimos la oportunidad de entrevistar a algunos de los actores así como a su director, quienes nos abrieron las puertas de su propio ropero para mostrarnos un poco de su personalidad.

 

Aarón Balderi

 

¿Cómo llegaste al teatro?

Soy egresado del Centro de Formación de Actores para la Televisión (CEFAT) de, tengo cinco años de carrera como actor en series, tanto aquí como en el extranjero; por ejemplo estuve trabajando en Colombia, en la serie Arrepentidos, he participado en cine y ya llevo tres temporadas en Microteatro, ha sido muy padre.

 

¿Cuál es la diferencia entre la forma de trabajo en México y otros países?

Mi experiencia en Colombia fue muy agradable desde que el director se presentó con nosotros y hubo complicidad entre director y actores, eso es muy importante, es tu guía y tiene que haber empatía, y eso lo ves en toda la producción, desde los técnicos hasta el productor. Todos trabajan con un amor… que de verdad siempre están sonrientes: Rodo mundo de buena gana, todo mundo tiene pasión, que creo que aquí en México a veces es complicado hacer armonía dentro de un equipo de trabajo y más cuando son semanas, digamos tiempo largo de convivir, creo que es muy importante y aquí sí sucede, pero allá, en Colombia, desde mi experiencia, son entregados a mil a lo que están haciendo y se siente, y eso se vive se vibra y se ve el resultado.

 

¿Es muy ruda la competencia entre actores?

Los actores somos ególatras por excelencia y no hablo en mal plan, nos gusta exigirnos de más a veces, ser excelentes en lo que hacemos. Nos esforzamos, a veces, de más porque queremos hacer algo que sea digno y que vaya un poquito más allá de lo que creemos, que podemos dar y nos exigimos el doble o el triple, yo lo que procuro es súper alivianado, rejalado, yo me encargo de venir a trabajar, de cumplir con mi trabajo,  pero también soy muy amiguero, soy muy sociable. Y siempre trato como de llevarla bien con todo mundo y tengo muchos amigos actores que,  aunque se dice que es complicado tener amigos en el medio, yo los tengo. Te puedo decir que, al contrario, todos nos ayudamos, nos decimos: está esto y lo otro, están buscando gente para esto o lo otro. No somos competencia, eso es una realidad. Esa etiqueta de “compito con él por un papel” no es cierta. Hay una esencia básica y el papel tendrá que ser para quien tenga que ser.

 

¿Qué le recomiendas a quienes quieren tener un lugar en esta carrera?

Está implícito en nuestra obra: nunca dejar de soñar. Justo hoy que posteaba fotos de la obra y una prima me escribió que recuerda el primer día en el que llegué con la cabeza hecha trizas y un mundo entero por descubrir. Sí se puede, y aunque sueñe trillado, siempre hay gente que te malvibra o que quiere hacer que tires la toalla. Pero eso sí, es una carrera de hechos.

 

¿Qué vives función a función?

Cada función es diferente, el espacio es diferente, el público es diferente. Como actor debes romper esquemas, abrir la cabeza. Ha venido gente de trayectoria y me han dicho que jamás harían eso…les impresiona demasiado el espacio. A mí me ha dejado experiencias maravillosas y siempre es diferente. Aquí no hay manera de mentirle a la gente: o te lo creen o no te lo creen. A los que nos gusta enfrentarnos a retos es bien padre y es bien bonito porque cuando ves o sientes a la gente que responde a lo que estás haciendo de la manera en la que nos ha tocado vivirlo esta semana, creo que es suficiente para irnos más que tranquilos a nuestras casas, y volando.

 

“Cuando dejas de soñar, dejas de vivir”.

Aaron Baldieri

 

FUNCIONES:

Jueves y Viernes: 8:05, 8:35, 9:05, 9:35, 10:05, 10:35 pm

Sábado: 7:05, 7:35, 8:05, 8:35, 9:05, 9:35 pm

Domingo: 6:05, 6:35, 7:05, 7:35, 8:05, 8:35 pm

ROBLE #3

COL. SANTA MARÍA LA RIBERA

MÉXICO, DF