En el marco del aniversario 400 de la muerte de William Shakespeare, que se conmemora este año, el ciclo de proyecciones del National Theatre Live iniciará este 2016 en el Lunario del Auditorio Nacional, con una de las grandes obras de este escritor británico: Hamlet, protagonizada por el gran actor Benedict Cumberbatch.
La llamada Cumberbatchmanía llega al foro alterno del Auditorio Nacional este fin de semana; a partir del domingo 17 de enero se proyectará Hamlet. La nueva producción del National Theatre de Londres es el sexto montaje de la compañía de este emblemático clásico shakespeareano, que muestra la vigencia de la obra estrenada a comienzos del siglo XVII. Completan el reparto Sian Brooke, Ruairi Conaghan, Diveen Henry, Karl Johnson y Sergo Vares, entre otros.
El programa National Theatre Live, que proyecta en diversos teatros y cines del mundo las mejores producciones de la compañía londinense, fue puesto en marcha en junio de 2009 a instancias de Nicholas Hytner, y del productor David Sabel, quienes deseaban extender las fronteras de la experiencia teatral tradicional.
Si bien Cumberbatch forma parte de una extensa cadena de actores que han dado vida al príncipe de Dinamarca -desde Laurence Olivier y Peter O’Toole, hasta Kenneth Branagh, Simon Russell Beale, Rory Kinnear y David Tennant, no se había visto en la historia del teatro británico una expectación tan grande del público por ver el clásico de Shakespeare.
En pocas horas, 100 mil boletos fueron vendidos para ver Hamlet en el Teatro Barbican. El empeño de las fanáticas en grabar con sus teléfonos inteligentes escenas de la obra llevó a Cumberbatch a solicitar que dejen de hacerlo porque las pantallas de los aparatos provocan distracciones en el elenco.
Pero la atracción que el actor de 39 años ejerce no es privativa del público; en noviembre pasado recibió la medalla de Comandante de la Orden del Imperio Británico en el Palacio de Buckingham, distinción otorgada por la reina Isabel II por sus servicios en el ámbito de las Artes Escénicas y Obras de Beneficencia, convirtiéndose en una de las personalidades más jóvenes en recibir la distinción.
Lo que ha cautivado a la crítica y aficionados al teatro sobre esta nueva versión de la obra de Shakespeare, es la posibilidad de ver en escena a uno de los grandes actores británicos encarnando el reto de meterse en la piel de Hamlet, y atestiguar su regreso a la más prestigiada compañía teatral de Gran Bretaña después de que en 2011 protagonizó Frankenstein, bajo la dirección de Danny Boyle, y por el que recibió el premio Oliver