Más de 250 piezas de talavera entre las que figuran ejemplares de los siglos XVI al XIX, pertenecientes al acervo del Museo Franz Mayer, y contemporáneas propiedad de colecciones sobre las firmas Talavera de la Reyna, Uriarte Talavera, Talavera Santa Catarina y Talavera de la luz, integran la exposición “Talavera poblana. Pasado y Presente”.
Bajo la curaduría de Farzaneh Pirouz, la muestra, que a partir de mañana se exhibe al público, forma parte de los festejos por los 30 años del museo y explora el extenso recorrido de la cerámica esmaltada por Asia, Europa y África.
En rueda de prensa, Héctor Rivero Borrel, director del espacio museístico, celebró esta muestra realizada en colaboración con artistas y artesanos de Puebla y señaló que la talavera en México continúa siendo un arte lleno de vitalidad y fuerza de manera constante en todo el país, no sólo en Puebla.
El secretario de Cultura de Puebla, José Alberto Lozoya, refirió que la exposición es un proyecto de importancia estética para la institución que encabeza y recordó que la belleza y exquisitez de la talavera se remonta al Medio Oriente, luego al Mediterráneo y enseguida a Asia.
La exposición se divide en nueve núcleos y ofrece un recorrido único por la historia de la cerámica esmaltada y las técnicas decorativas, con el uso del azul cobalto y el de pigmentación en superficie blanco, mediante el diseño, la forma y el tipo de producción, el cual comienza en Irak y continúa en regiones del Medio Oriente, pasando por Europa y trasladándose al continente novohispano en el siglo XVI.
Para Farzaneh Pirouz, organizadora de la exposición, la técnica con que se realizaba la talavera en Irak y que más tarde llegó a España y luego a México, vive y es el alma de la producción de la verdadera talavera.
“De tal suerte que en la exposición se podrán apreciar ejemplos de artistas que colaboraron con alfareros para poder crear objetos, así como vajillas que se utilizan hoy en México, dijo al tiempo que comentó que la industria sobrevive en México, excepto en países de origen como Egipto, Irán, Siria, “porque producir es muy caro”.
Este proceso difícil, señaló, lo tienen bien guardado en Puebla y lo aprecian los mexicanos, de tal suerte que la talavera hoy es un símbolo del arte nacional y es un éxito de los alfareros.
“Periodo islámico; Europa: Distribución de la técnica de cerámica esmaltada”; “Desde España hasta Puebla de Los Ángeles”; “La edad de oro de Puebla de los Ángeles 1650-1750”, “Azulejos: La característica por excelencia de Puebla de Los Ángeles”; “Decadencia comercial de Puebla 1750-1900”; son los ejes temáticos de la exposición.
Se complementan con: “El esfuerzo de un hombre para reactivar la industria de la cerámica esmaltada: Enrique Luis Ventosa”, “Tradición de la marca en la Talavera contemporánea” y “Expectativas y posibilidades”.
Tras su exhibición en el Franz Mayer, la muestra viajará a la ciudad de Dallas, en Estados Unidos, y en el 2017 se prevé que se presente en el Museo Internacional del Barroco, en Puebla.