A partir del próximo ciclo escolar 2016-2017, en la Ciudad de México se pondrá en marcha un protocolo efectivo de prevención para evitar violencia, acoso y abusos sexuales en las escuelas y, en el transcurso del año, se prevé que se extienda al resto del país.
Así lo dieron a conocer Javier Treviño Cantú, subsecretario de Educación Básica; Luis Ignacio Sánchez, administrador federal de Servicios Educativos en la ciudad; y Enrique Guadarrama, Segundo Visitador de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, quienes coincidieron en la necesidad de acelerar el paso de la alerta temprana.
En conferencia de prensa, el subsecretario de la SEP expuso que el tema será objeto de tratamiento por parte de gobernadores y autoridades de educación de toda la nación.
Hoy, trabajando de la mano con la CNDH estamos construyendo un protocolo efectivo, pensando una supervisión que, además de ser administrativa, tenga una mirada más calificada para atender o detectar estas situaciones”, indicó Treviño Cantú.
A su vez, el administrador federal de Servicios Educativos en la Ciudad de México expuso que las escuelas “siguen siendo el espacio seguro por excelencia en el país y en la Ciudad de México en particular”.
“Entendemos el tamaño del reto que tenemos. Nos estamos comprometiendo a que además haya cursos para que no sólo tengamos el papel, sino que además de todo el personal docente, directivo y padres de familia conozcan el mecanismo de cómo se va a actuar”, acotó.
Luis Ignacio Sánchez asentó que “debe de haber un antes y un después” de este caso e indicó que a partir de “ya”, existe el teléfono de buzón escolar 3601-8700, para que los padres de familia se contacten directamente con las autoridades competentes en caso de que necesiten alguna asistencia.
Este es un tema difícil, fuerte, que nos tiene absolutamente indignados”, dijo el administrador en la capital del país, quien aseguró se hará todo lo posible para que no se repitan casos como el del Colegio Montessori Matatena.
Matatena nos hizo aprender muchas cosas, y una de ellas es que nuestros protocolos de prevención no son tales. Hacen falta mecanismos de comunicación más sensibles, confiables y empáticos para acabar con lagunas, dijo Luis Ignacio Sánchez.
Los funcionarios coincidieron en que para poner en marcha un protocolo efectivo de prevención no se reparará en nada. “Tenemos que ser imaginativos para que los mensajes lleguen de manera efectiva a todos en todo el país”.
A ello nos pueden ayudar los cursos en línea, los mensajes vía celular y toda la tecnología actual”, dijo el Segundo Visitador.