La primera jornada de las presentaciones de la Feria Internacional de la Música (FIM) presentó tres propuestas musicales opuestas que encontraron el fiel de la balanza en este encuentro musical: La Santa Cecilia, Diamante Eléctrico y Tulipa Ruíz.
Los primeros en salir fueron los de La Santa Cecilia, quienes, con su sabor latino impregnado/contaminado del sonido de Los Ángeles, su sincrético sonido y el carisma de su vocalista Marisoul, sedujeron desde el primer minuto a los asistentes. Además de estrenar unos temas de su nuevo disco: Cómo Dios Manda, los angelinos se tomaron una licencia creativa y se rifaron con una versión de Strowberry fields forever, de los Beatles, pero más guapachoza y cadenciosa. Antes y después de este cover, su actuación no sufrió ningún sobresalto y se deslizó de manera solvente.
La primera sorpresa de la velada fue Diamante Eléctrico, la furia e indelicado sonido de los colombianos atacaron ipso facto los tímpanos de los reunidos, para después irrigar todos los órganos hasta hacer mover tímidamente la pierna en algunos y hacer headbanging, mover la mata, en otros.
Diamante Eléctrico no bajó de nivel y puso calientita la primera noche de showcases de FIMPRO.
La tercera en turno y segunda sorpresa fue la brasileña Tulipa Ruíz; al principio se le vio un poco acartonada, como que no encontraba conexión con el público, pero como el té creativo y después de las palabras: «Como se sabe el Presidente brasileño se valió de artimañas para conseguir gobernar mi país, así que necesitamos que nos apoyen para que regrese la democracia en Brasil», después de eso el público asistió a una de las transformaciones más directas de una artista sobre el escenario. El canto y la figura de Tulipa se volvió indómita e irresistible para los ojos/oídos del puñado de asistentes que presintieron lo que Tulipa estaba germinando con su espectáculo.
Al final todos se quedaron con ganas de más de Tulipa, pues la probadita dejó expectativas de cómo sería un show completo de la brasileña.