El escritor estadounidense Richard Ford, autor de numerosas novelas y cuentos, fue declarado ganador del Premio Princesa de Asturias de las Letras 2016, informó el jurado reunido en Oviedo, norte de España.
En su acta, el jurado consideró que la obra de Ford se inscribe en la gran tradición de la novela americana del siglo XX, en la que destacan títulos como “El periodista deportivo”, “Acción de gracias” y “Canadá”.
“El cuidado detallismo en las descripciones, la mirada sombría y densa sobre la vida cotidiana de seres anónimos e invisibles, conjugan la desolación y la emoción de sus relatos”, sostuvo.
Asimismo refirió que todo ello “convierte a Ford en un narrador profundamente contemporáneo y, al tiempo, en el gran cronista del mosaico de historias cruzadas que es la sociedad norteamericana”.
Nacido en Jackson, el 16 de febrero de 1944, escribió su primera novela “Un trozo de mi corazón” (1976) y compaginó por muchos años su trabajo como profesor universitario y periodista deportivo.
La Fundación Princesa de Asturias recordó que es “considerado por algunos el heredero legítimo de Hemingway, e influido como él mismo ha reconocido, por William Faulkner, es también calificado por Raymond Carver como el mejor escritor en activo de Estados Unidos”.
El autor ha rechazado estar dentro del “realismo sucio”, una derivación del minimalismo caracterizada por su tendencia a la sobriedad, la precisión y la parquedad extrema en el uso de las palabras en las descripciones.
Los personajes de sus obras “suelen ser seres vulgares, con vidas convencionales, que se mueven en atmósferas densas, y ha sido tachado por ello de hacer una literatura pesimista y de narrar historias frías protagonizadas por unos personajes desolados y sin esperanza”.
Entre sus novelas destacan “La última oportunidad” (1981), “Incendios” (1990), la trilogía protagonizada por Frank Bascombe; un escritor fracasado de New Jersey que trabaja primero como periodista deportivo y después como agente inmobiliario.