Con las presencia de Rosa Beltrán, Juan Villoro y Enrique Serna, se conmemoró el 50 aniversario de la novela del escritor, quien firmó autógrafos después del acto
«!Está muy padre!”, fueron las palabras que muy contento dijo José Agustín respecto al homenaje que se hizo con motivo de los 50 años de su novela De perfil. Al final del evento, el escritor dio una firma de autógrafos para los asistentes que abarrotaron la Sala Manuel M. Ponce y la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes.
En un inicio no se tenía contemplada la presencia de José Agustín, sólo se había asegurado la presencia de Rosa Beltrán, Juan Villoro y Enrique Serna, pero la intempestiva llegada del escritor provocó que el público lo recibiera con un cálido aplauso.
Rosa Beltrán, Enrique Serna y Juan Villoro tomaron la palabra, cada uno, muy a su estilo, contaron anécdotas de los primeros acercamientos a los textos de José Agustín, su experiencia con De perfil, así como anécdotas no sólo con el escritor, también con su familia.
Villoro describió a José Agustín como una persona muy generosa y le atribuyó el que haya incursionado en las letras. “Gracias a De perfil, comencé a leer literatura. José Agustín es una de las personas que más ha enriquecido mi vida”.
Sobre los recursos de los que se vale el autor nacido el 19 de agosto de 1944 en Guadalajara, Jalisco, también habló Villoro: “José Agustín pertenece a las vanguardias de México, porque sus búsquedas han sido muy originales. Ha incorporado muchos recursos de la cultura de masas, la contracultura, el punto de vista juvenil, el trabajo tan elaborado y tan riguroso con el lenguaje. Estamos ante un artífice de vanguardia”.
Además, Villoro se proclamó en contra de catalogar a un autor, pues es algo que lo limita. “Con frecuencia se dice que incorporó el lenguaje coloquial de su generación a la literatura, esto es cierto, pero lo más importante es que lo reinventó. Es un escritor que, creo, debe ser despojado del mote de Literatura de la Onda, porque es reductor, equívoco, pues pone el acento en un contenido contracultural y no en recursos artísticos de vanguardia que trajo a nuestra literatura”.
En su turno, Enrique Serna, autor de libros como La sangre erguida y El miedo a los animales, compartió “Permanencia de lo efímero”; ensayo que preparó para el homenaje y en el que destacó la pícara forma con la que narra José Agustín en sus novelas, cuentos o ensayos.
Por otra parte, Rosa Beltrán relató que a su ingreso a la carrera de Letras Hispánicas, Huberto Batis le dijo que leyera a José Agustín. “Me dijo que quería que leyera un libro, Se está haciendo tarde, de José Agustín, y que lo leyera De perfil. Tuve esta confusión al pensar que me estaba pidiendo una forma de lectura. De manera que lo primero que leí de José Agustín fue Se está haciendo tarde, lo leí con enorme asombro por la intensidad del mundo del que hablaba de la libertad del lenguaje. A partir de entonces me convertí en su fan”.
Beltrán aceptó que el autor de Ciudades desiertas incidió en ella y la ayudó a definir qué tipo de literatura quería realizar. “José Agustín ha influido en todos, en mi caso supe qué literatura quería escribir. Desde que escribí mi primera novela, La corte de los ilusos, lo que hago es desmontar, o escribir a contracorriente”.
A pesar de que De perfil es la historia de un joven, Rosa Beltrán aseguró que no necesariamente debes de ser joven para leerlo. “Cualquiera que se acerque a los libros de José Agustín se va a fascinar por el lenguaje, porque la voz narrativa no te suelta, no importa de qué esté hablando, sino cómo habla”.