Una nueva tecnología electrónica y bioquímica que desarrollaron juntos ingenieros de México, Chile y Grecia permite detectar la presencia de cáncer de estómago desde la primera fase de aparición de la enfermedad, con sólo un mililitro de sangre de cada paciente. Este proceso evita que muchas personas con factores de riesgo oncológicos sean sometidas a intervenciones invasivas, caras y dolorosas, como las gastroendoscopías, que buscan tumores malignos.
La innovación fue presentada ayer en la Ciudad de México en el encuentro Kloud Camp, donde se dan a conocer oportunidades que ofrece el gigantesco ambiente de almacenamiento y procesamiento de datos conocido como la nube.
Jorge Soto, Ingeniero en Sistemas Electrónicos, egresado del Tecnológico de Monterrey, es uno de los cofundadores de la empresa que desarrolló la nueva tecnología, cuyo nombre es Miroculus y tiene como actual sede San Francisco, California, Estados Unidos. Él explicó que a partir de un mililitro de sangre se puede realizar un proceso bioquímico que es la búsqueda de algunas moléculas que están asociadas al cáncer de estómago, en particular de algunos tipos específicos de microRNA. Esta búsqueda y detección se logra con reacciones químicas fluorescentes.
“Nos interesan los cánceres que son muy difíciles de diagnosticar y que son extremadamente mortales. Además de cáncer de estómago, estamos dialogando con varios hospitales para hacer estudios sobre cáncer de esófago, páncreas y también cáncer de mama. Queremos ver cuál es la mejor manera de abordarlos”, dijo a Crónica el ingeniero mexicano.