El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, instó a la comunidad internacional a responder con celeridad a la emergencia humanitaria que presenta Haití, el país más pobre de América, señalando que es una cuestión de vida o muerte.
Ban indicó que Les Cayes, fue una de las localidades más golpeadas por el huracán Matthew, que causó más de 300 muertes y dejó gran destrucción a su paso por el país el 4 de octubre.
Ahora hay que apoyar el nuevo plan para afronta el cólera en Haití, que incluye asistencia material a los afectados por la epidemia y precisa 400 millones de dólares para su implementación.
Ban se trasladó en helicóptero desde la capital, Puerto Príncipe, hasta Les Cayes, al sur de Haití, para reunirse con los damnificados albergados en una escuela y reafirmarles el compromiso de Naciones Unidas (ONU) de ayudarlos en tan difícil momento.
Según la ONU, más de 2.1 millones de haitianos fueron afectados por el meteoro y al menos 1.4 millones necesitan asistencia humanitaria urgente.
Recordó que Naciones Unidas lanzó un llamado de 120 millones de dólares para los operativos de ayuda humanitaria y conminó a los donantes internacionales a responder con celeridad a la emergencia.
Por otra parte, el titular de la ONU se refirió a la epidemia de cólera y dijo que el embate del huracán dificulta más los esfuerzos por combatirla y aumenta los riesgos de transmisión.
Agregó que, por ello, el sistema de la ONU ha redoblado las tareas de contención de la enfermedad, e instó a la comunidad internacional a apoyar el nuevo plan para afronta el cólera en Haití, al igual que los trabajos para que la población tengan acceso a servicios de agua potable, de salud y de saneamiento.