La muestra “José Luis Cuevas. Obra de antología” está integrada por 92 dibujos y tres esculturas, que fueron seleccionadas por él mismo, ya que provienen de su colección personal que resguarda en su casa. La obra más temprana es el dibujo a lápiz Retrato de un clérigo, de 1952, y la más reciente la escultura en bronce Autorretrato como obrero, de 2013.
La mayoría de las piezas son de los años 60, 70, 80 y 90 del siglo pasado, y fueron realizadas en diferentes ciudades del mundo como consta en las inscripciones. Cuevas tenía la costumbre de anotar no solo el año, sino también el día y el mes de la ejecución de cada obra. Llaman la atención dos dibujos hechos con grafito, alusivos al movimiento estudiantil de 1968.
En uno de los espacios de la galería se ha colocado toda la obra de Cuevas de tema sexual, que remite el espectador a la Sala Erótica en el museo que lleva su nombre. En esta obra de los años 80, el dibujante y grabador se retrata una y otra vez con mujeres, amantes y prostitutas.
Para Óscar Román, dueño de la galería, se trata de que el público redescubra al artista y tenga una visión amplia de su trabajo. Según el galerista “de repente a los grandes maestros no los valoramos en vida y no les damos el lugar que deben tener. La muestra es un reconocimiento al valor y trayectoria que Cuevas ha tenido en su producción.”