Las marcas chinas se han erigido este año en duros competidores para las del resto del mundo y han presentado ‘smartphones’ espectaculares. Estos son los mejores para todos los bolsillos.
No hay más que echar un vistazo al ránking mundial de las diez marcas que más teléfonos móviles venden para encontrarse con una maraña de nombres chinos. No en vano, solo Samsung, Apple y LG logran hacerse un hueco en este dinámico ‘top ten’ en el que pegan con fuerza empresas poco conocidas fuera de China, como OPPO o Vivo. No obstante, poco a poco cada vez son más las que se deciden a iniciar su proceso de internacionalización y llegan de forma oficial a mercados como el Europeo o el Latinoamericano. No obstante, su abrumador número dificulta separar la paja del trigo. Para facilitar esa tarea, a lo largo del año hemos probado una treintena de terminales. Estos son los mejores en los diferentes segmentos de precio.
El ‘smartphone’ del año
1. Xiaomi Mix
En la primera posición no caben dudas. El Mix que Xiaomi presentó por sorpresa hace un par de meses es el único móvil del año -y no solo entre los chinos- que ha logrado dejar a todos con la boca abierta. Y no es para menos. En un mercado cada vez más saturado de aparatos que apenas se diferencian unos de otros, la pantalla sin apenas marcos del teléfono que ha diseñado el francés Philippe Starck es un sonoro puñetazo al resto de marcas. Como muchos analistas han apuntado, el Mix es lo que el iPhone 7 debería haber sido. Y es posible que ni siquiera el año que viene Apple logre fabricar un terminal que provoca tanta admiración.
Evidentemente, el Mix no es perfecto. El diseño en cerámica es muy llamativo, pero también se ensucia fácilmente y es extremadamente frágil. Por otro lado, Xiaomi ha optado por contener el precio de un terminal extremadamente complicado de fabricar, en el que solo el 20% de los cuerpos cerámicos pasa el test de calidad, y eso ha ido en detrimento de otros componentes. La cámara es el que más falla. Las fotografías en condiciones de poca luz son mejorables, y se echa de menos un estabilizador óptico para compensar la falta de luminosidad del objetivo.
La última pega del Mix es lo complicado que resulta conseguir uno. Las dificultades de fabricación han hecho que incluso en China sea casi imposible comprarlo, y muchas de las tiendas ‘online’ especializadas todavía no lo tienen o cuentan con remesas poco abundantes. De momento, GearBest permite adquirirlo desde 724 euros en la versión de 4GB de memoria RAM, y por unos 815 euros en el caso de la que monta 6GB y cuenta con ribetes de oro en la cámara. Ambas incluyen una funda de cuero de gran calidad. Eso sí, teniendo en cuenta que se envía desde el almacén de China, la garantía también se sirve desde allí.
Los mejores de la gama alta
2. Meizu PRO6 Plus
Este año, Meizu ha tardado en atinar con el móvil que quería fabricar para asaltar la gama alta. Ha dado bastantes tumbos y, aunque nadie discute la calidad delresto de terminales de la gama PRO6 que han visto la luz en 2016, la versión Pluses, sin duda, la más lograda de las tres. De hecho, es el teléfono más completo y equilibrado de todos. Quizá no sobresalga en ninguno de los apartados, pero tampoco decepciona en ninguno de ellos como sucede con el Mix y el Mi Note 2, cuyas cámaras son manifiestamente mejorables. Además, es el único que opta por un chip Samsung Exynos 8890 que funciona extraordinariamente bien acompañado de 4GB de memoria RAM. Pueden parecer poco si se compara con los 6GB de otros terminales en esta lista, pero son más que suficiente incluso cuando se utilizan exigentes aplicaciones de edición de vídeo o juegos.
Además, cuenta con uno de los diseños más acertados del año. Sencillo, pero elegante. Sin estridencias, pero fabricado con materiales de gran calidad que lo hacen delgado y ligero para un phablet de 5,7 pulgadas. Se agradecen la pantalla 2K, una de las mejores que hemos probado en 2016, el sistema 3D Touch, que discrimina la presión que el usuario ejerce sobre la pantalla para acceder directamente a funciones concretas de las aplicaciones sin necesidad de abrirlas, y, sobre todo, el botón M-Back, que cuenta con uno de los lectores de huellas dactilares más rápidos -y seguros- y agrupa en un solo botón las funciones de los tres que caracterizan a Android. Por si fuese poco, el sonido Hi-Fi mejora la experiencia multimedia.
La cámara, que no ofrecía imágenes a la altura de la gama más exigente en el PRO6 original, mejora notablemente con el nuevo sensor Sony y el estabilizador óptico. La batería, de 3.400 mAh., dura más de lo esperado gracias a la optimización del sistema, que alarga su vida hasta los dos días con un uso moderado. Y la carga rápida, aunque no es la más asombrosa del mercado, llena casi un 60% de la capacidad en solo media hora.
Además, la nueva versión de Flyme -la 6-, avanza medidas de seguridad que seguramente terminarán copiando otras marcas. Una de las más interesantes es la posibilidad de crear tres tipos de espacios diferenciados a los que se puede acceder utilizando dedos diferentes en el sensor de huellas. De esta forma, el espacio privado, que cuenta con una encriptación especial, es mucho más difícil de hackear. Finalmente, el nuevo ‘modo niños’ que estará disponible desde enero, ofrecerá la posibilidad de controlar el tiempo que los más pequeños pasan frente a la pantalla y determinar a qué contenidos pueden acceder. Su precio fuera de China todavía no se ha decidido, pero rondará los 550 euros si se comercializa en la tienda oficial de Meizu en España, donde sí se puede adquirir elPRO6 básico por 399 euros. Con garantía y servicio técnico en nuestro país.
3. OnePlus 3T
Es indiscutible que la primera sensación que dejó el OnePlus 3T nada másmostrarse al público fue la de decepción. Sobre todo porque deja intacto el diseño insípido de su antecesor, el OnePlus 3, cuando podría haber aprovechado para imprimirle más carácter y limar el objetivo de la cámara, que sobresale en exceso. Pero también son indiscutibles la calidad del terminal y las mejoras que la joven empresa de Shenzhen ha realizado en los apartados en los que flaqueaba el anterior. De hecho, la combinación del chip Qualcomm Snapdragon 821 -a una frecuencia de 2,35 Ghz.- y 6GB de memoria RAM lo convierten en uno de los terminales más potentes de esta lista y del mercado, junto a las versiones más avanzadas del Xiaomi Mix, el Xiaomi Mi Note 2, y el LeEco LePro 3. Y la optimización y la ligereza de la capa Android diseñada por la marca -llamada Oxygen- le dan cierta ventaja en la velocidad y la fluidez a la que se mueve.
No obstante, y aunque este es un apartado muy subjetivo, el sistema operativo es uno de sus puntos débiles debido a la escasa personalización que ofrece si se compara con el MIUI de Xiaomi o el Flyme de Meizu. Eso sí, OnePlus ha sabido aprovechar al máximo uno de los elementos de hardware que le da una ventaja interesante en el uso diario: el botón deslizante que sirve para controlar con un solo toque las notificaciones que el usuario quiere recibir en cada momento: todas, solo las prioritarias, o ninguna. Es perfecto para ocasiones en las que se requiere silencio y no se quiere llamar la atención sacando el teléfono.
4. Xiaomi Mi Note 2
Probablemente, el Mi Note 2 sea el teléfono más bonito del año. Pero también el que más recuerda a otro tristemente fallecido: el Samsung Galaxy Note 7. Cada cual decidirá si eso es una ventaja o un inconveniente, pero es evidente que Xiaomi ha sabido dar un golpe de efecto en el mercado tanto con este móvil como con el Mix que encabeza la lista. Después de dar la sensación de haber ido a remolque del resto de marcas durante más de un año, sus dos terminales estrella de 2016 son toda una declaración de intenciones: Xiaomi es capaz de innovar y de ofrecer gran calidad a un precio asombroso.
Concretamente, sus ‘smartphones’ cuestan en torno a la mitad de lo que el resto de marcas no chinas cobra por los equivalentes con características similares. No en vano, el Mi Note 2 se puede adquirir en España por solo 465 euros en la versión con 4GB de RAM y por cien euros más si se quiere ampliar esa variable hasta los 6GB. Es mucho menos de lo que costaba el Note 7 de la empresa surcoreana. Eso sí, como Xiaomi no está todavía oficialmente presente en España o Latinoamérica -salvo en Brasil, aunque únicamente con dos modelos-, la garantía se ofrece desde China.
En cualquier caso, el Mi Note 2 merece la pena el riesgo. No solo porque es un terminal especialmente potente -con el chip Qualcomm Snapdragon 821 que Xiaomi ha adoptado para todos sus terminales de gamas media y alta- que además cuenta con una generosa batería de 4.070 mAh. y una excepcional carga rápida, también porque es uno de esos diseños que llaman la atención, sobre todo en el acabado gris glacial que lo convierte en un espejo. Además, con una tapa trasera de cristal y doble curva -tanto de la pantalla como de la cubierta posterior-, es un móvil mucho más ergonómico de lo que hace pensar su generoso tamaño -tiene una pantalla de 5,7 pulgadas-. Eso sí, también es fácil que se resbale y es frágil.
Como sucede con el Mix, el mayor problema se concentra en la cámara, uno de los elementos más importantes de los móviles actuales. En situaciones de buena luz, el sensor Sony de 22,3 megapíxeles combinado con el objetivo f 2.0 ofrece buenos resultados. Sin embargo, en interiores poco iluminados y por la noche las fotografías son bastante malas. Aparecen bloques negros en las zonas más oscuras, y la definición de las altas luces es poco satisfactoria. Una vez más, seguro que algunos usuarios habrían preferido que Xiaomi ahorrase en otros elementos, como el chip NFC o el puerto de infrarrojos, que, aun siendo útiles, no resultan tan críticos.
5. LeEco LePro 3
No ha sido un buen año para LeEco. Su expansión excesivamente rápida -fabrica televisores, móviles, y está incluso probando suerte con el coche autónomo- ha dejado a la empresa sin capital y en una precaria situación económica que la ha convertido en noticia durante las últimas semanas. Sin embargo, eso no obsta para que haya presentado este año uno de los mejores móviles del mercado. El LePro 3 es un tope de gama en toda regla, con una potencia excepcional: chip Qualcomm Snapdragon 821, 6GB de memoria RAM, y una GPU Adreno 530.
Además, cuenta con una de las mejores parejas de cámaras: la principal está equipada con un sensor de 16 megapíxeles combinado con un objetivo de luminosidad f 2,0 que ofrece muy buenos resultados en todas las condiciones lumínicas, mientras que la cámara de los ‘selfis’ toma generosas imágenes de 8 megapíxeles. El vídeo también es de alta calidad -hasta resolución 4K- gracias al estabilizador electrónico que logra movimientos muy fluidos. Y la experiencia multimedia, muy importante en los LeEco porque sus usuarios pueden acceder al enorme archivo de películas y de series de la marca -aunque la mayoría está en chino o inglés y hay que registrarse previamente-, es especialmente grata: además de contar con una pantalla de 5,5 pulgadas y resolución FHD que responde muy bien incluso cuando hay mucha luz ambiental, el LePro 3 viene equipado con dos altavoces estéreo en la parte inferior y con un chip Dolby que crean un sonido envolvente y potente muy raramente visto en móviles.
6. OPPO R9s
Aunque en Europa y Latinoamérica todavía no es muy conocida, OPPO se ha convertido en la cuarta marca de móviles que más unidades vende en el mundo, y continúa creciendo a gran velocidad gracias al incremento de su cuota de mercado en dos de los principales mercados del planeta: China e India. Eso, no obstante, ha provocado que su internacionalización en mercados más desarrollados se haya parado o, incluso, que haya retrocedido. Así, OPPO ha dejado de vender oficialmente en Europa, por lo que hay que regresar a los canales de importación paralela para hacerse con sus aparatos.
En cualquier caso, el nuevo R9s demuestra que 2.600 millones de personas no están equivocadas. Si la empresa china ha logrado el éxito en dos países tan complicados, es gracias a la solidez de sus terminales. De hecho, el R9 ha sido este año uno de los más vendidos de China, y el R9s es un digno sucesor. Mantiene el cuerpo metálico ultrafino -lo que no le impide continuar incluyendo un jack de auriculares-, rediseña las antenas para que dibujen líneas muy finas en la tapa trasera -algo nunca visto antes-, e incorpora uno de los objetivos más luminosos jamás vistos en un móvil -con una óptica f 1,7 que antes solo Samsung había utilizado en sus tope de gama-. Así, el R9s hace honor al prestigio de la marca como especialista en imagen.
En cualquier caso, como sucede con el Meizu PRO6 Plus, lo mejor del R9s es el conjunto. Nada sobresale, pero todos los componentes son de gran calidad. Así, es uno de esos ‘smartphones’ en los que se puede confiar, ya que no se quedará desfasado en un par de años. Además, incluye de serie el idioma español, algo poco habitual entre las marcas chinas que no tienen presencia oficial en España o Latinoamérica y que agradecerán quienes no quieran tener que lidiar con el inglés. Por otra parte, el sistema operativo Color OS es uno de los más intuitivos y personalizables del mercado, con multitud de funciones activadas por gestos, y resulta menos recargado que otras capas de Android de fabricantes chinos. Finalmente, la relación calidad-precio es casi tan excepcional como en el OnePlus 3T, ya que el R9s se puede adquirir por 425 euros.
El mejor de la gama media
7. Xiaomi Note 4
La profusión de lanzamientos en la gama media complica mucho la elección de un terminal que sobresalga. De hecho, casi todas las marcas chinas ofrecen smartphones en este rango de precio. No obstante, no es oro todo lo que reluce, y no hay tantas que fabriquen teléfonos de gran calidad entre 175 y 300 euros. Por ejemplo, por un poco más Meizu comercializa el magnífico MX6, que ya probamos en EL PAÍS, y ZTE tiene el Axon 7 Mini, que es la versión más económica de uno de los mejores móviles de la primera mitad del año. Sin embargo, hemos dado prioridad a la relación calidad-precio, una categoría en la que Xiaomi resulta imbatible.
El RedMi Note 4 es un teléfono cuyo diseño y características se parece a muchos otros: un cuerpo metálico surcado por las líneas paralelas que dibujan las antenas en los extremos superior e inferior, lector de huellas dactilares -en este caso, situado en la parte trasera-, 3 GB de memoria RAM acompañados de un chip de gama media -el Mediatek Helio X20 de diez núcleos cuyo comportamiento es muy satisfactorio-, pantalla de 5,5 pulgadas con resolución FHD -que parece haberse convertido en el estándar de los móviles con el apellido ‘Note’-, y un par de cámaras que hacen el trabajo sin resultados espectaculares pero con solvencia.
Lo que diferencia al RedMi Note 4 del resto es que pocos cuestan poco más de 175 euros -a veces incluso menos si hay ofertas- y ofrecen una calidad de construcción tan sólida. Además, el sistema MIUI está tan bien optimizado que el rendimiento del terminal es muy similar al de los que incluyen chips Qualcomm. Por si fuese poco, como ya hemos analizado en otras ocasiones, ha sido pionero en la ‘clonación’ de aplicaciones -que permite utilizar dos cuentas diferentes de forma simultanea, ya sean de Whatsapp, Facebook, Twitter, o muchas otras apps- y cuenta con una función muy sencilla de usar para crear dos espacios diferentes, similares a las cuentas de usuarios de los ordenadores.
El mejor de la gama económica
8. Meizu M3s
La gama más económica de los teléfonos móviles está plagada de terminales que invitan a la desconfianza. Si ya es un riesgo adquirir aparatos que no cuentan con garantía en España, hacerlo a través de canales opacos y comprando marcas que ni siquiera se venden en China es tentar demasiado a la suerte. Afortunadamente, Meizu ha lanzado de forma oficial en nuestro país el M3S, que cuesta solo 159 euros (con envío desde España y dos años de garantía en territorio nacional) y que resulta sorprendentemente sólido. De hecho, el diseño es una copia en miniatura -cuenta con una pantalla de 5 púlgadas- del buque insignia del año pasado, el PRO5, lo cual es garantía de buenos materiales.
Lógicamente, es un terminal básico no apto para quienes deseen altas prestaciones o estén enganchados a los juegos. Los 2GB de memoria RAM son suficiente para utilizar las aplicaciones más habituales, pero no permiten sobrepasarse con la multitarea, y el procesador de ocho núcleos logra bastante fluidez en el sistema siempre que no se tengan demasiados programas abiertos. Lo mismo sucede con las cámaras, que son correctas pero no entusiasman. Si acaso, uno de los puntos más notables está en la batería de 3.020 mAh., que ha durado casi dos días con un uso moderado. En gran medida, eso se debe a que monta la pantalla más pequeña de los terminales de esta lista, y también la de menor resolución (720×1.280 píxeles).
– Nota final: 7
De esta forma, el M3S parece ideal para quienes no quieren gastar un dineral en un móvil que utilizarán para realizar las funciones más básicas: llamadas, servicios de mensajería instantánea, redes sociales, Internet, y fotografías ocasionales sin pretensiones. Puede ser también un buen móvil de iniciación o para adolescentes. Como sucede con todos los que Meizu vende de forma oficial, cuenta con idioma español en su sistema Flyme y está equipado con las bandas de frecuencia 4G utilizadas por los operadores españoles de telefonía, algo que no ofrecen todos los móviles chinos.