Usar esponjas artificiales simples, pero súper absorbentes, podría reducir el costo de limpiar el crudo vertido en derrames petroleros en países en desarrollo.
Un equipo de investigadores del Instituto Italiano de Tecnología, en Génova, encontró que las esponjas hechas con espuma de poliuretano absorben petróleo de manera más eficiente que otras esponjas más costosas, cuya superficie ha sido modificada con nanopartículas.
Los científicos descubrieron que la espuma de poliuretano con poros de menos de la mitad de un milímetro puede atrapar unos 30 gramos de petróleo por gramo de espuma, lo que triplica la capacidad que ofrecen otras esponjas hechas de polipropileno tratado, el material más común hasta ahora para la limpieza de derrames de petróleo.
“Decidimos mostrar qué tan importante es la propia estructura de las espumas que son usadas para recuperar crudo vertido en el agua”, comentó el físico Javier Pinto, autor principal del estudio.
Además, el equipo demostró que casi todo el petróleo puede ser recuperado simplemente apretando la esponja, la cual puede ser reutilizada al menos diez veces más.
Las esponjas sintéticas usadas para absorber petróleo son usualmente modificadas con nanopartículas o con tratamientos químicos complicados. Estos métodos les permiten absorber más petróleo, por ejemplo, al asegurar que no absorban nada de agua.
“Este tipo de tratamientos no son realmente necesarios para alcanzar la capacidad máxima de absorción de petróleo”, dice Pinto.
Los resultados podrían cambiar la manera en que lidiamos con los derrames de petróleo, especialmente en los países en desarrollo, dijo Michel Boufadel, ingeniero ambiental del New Jersey Institute of Technology de los Estados Unidos. “La principal ventaja de este estudio es que las espumas absorben el petróleo en vez de depender de tratamientos químicos para hacerlo. Esto no solo reduce los costos de producción sino que también evita la posible contaminación que deriva de los tratamientos químicos”, explicó.
De acuerdo con la Federación Internacional Anticontaminación de Armadores de Buques Tanque (ITOPF por sus siglas en inglés), organización que monitorea y combate derrames químicos en mar abierto; casi 7.000 toneladas de petróleo se liberaron en el océano en 2015 y la mayoría de las veces desde barcos en países en desarrollo donde las regulaciones son menos estrictas o no son ejecutadas. Los derrames de petróleo pueden dañar o eliminar la fauna silvestre, y limpiarlos puede llevar años y costos de alrededor de US$18 por galón de crudo vertido, sin contar las consecuencias devastadoras que tienen sobre industrias como el turismo y la pesca.