El Centro Cultural Universitario Tlatelolco abre sus puertas a una instalación artística que enfrenta al espectador con una experiencia emocional enfrentan miles de migrantes mexicanos y centroamericanos cuando intentan cruzar la frontera sur de los Estados Unidos
«Flesh and Sand» es una experiencia sensorial inédita, creada con tecnología de punta por los cineastas Alejandro González Iñárritu y Emmanuel Lubezki, para recrear la travesía por el desierto que millones de migrantes mexicanos y centroamericanos tienen todos los días.
Mediante el uso de la realidad virtual y de un tratamiento narrativo múltiple –inspirado por historias verdaderas– los creadores logran una instalación de 400 metros cuadrados que borra la frontera entre los personajes y el espectador.
Esta producción de Mary Parent y ILMxLAB de Lucasfilm, financiada por Legendary Entertainment y Fondazione Prada, se exhibirá en el Centro Cultural Universitario Tlatelolco a partir de agosto de este 2017, después de su presentación durante el 70 Festival de Cannes. Además de la CDMX se montará en la Fundación Prada, en Milán, y en la ciudad de Los Ángeles.
Durante cuatro años González Iñárritu conoció y entrevistó a migrantes. Sus historias lo persiguieron al punto que decidió crear esta pieza artística única en su género gracias a la cual el público se ve obligado a caminar por el desierto para presenciar y compartir la condición humana de quienes cruzan ilegalmente las fronteras entre naciones.
Los actores que participan en este trabajo son migrantes reales que decidieron compartir su historia personal. Trabajar con tecnología de realidad virtual permite que el espectador se vuelva personaje de la instalación. Después de vivir la experiencia resulta imposible no empatizar con los dolores y fatigas de la migración.
Flesh and Sand es resultado de la colaboración entre Iñárritu y Lubezki, dupla que se encuentra detrás de aclamadas películas ganadoras del premio Óscar como Birdman y The Revenant. Podrá visitarse en el Centro Cultural Universitario Tlatelolco a partir del mes de agosto.
La presentación de esta pieza en la Ciudad de México es posible gracias al trabajo conjunto y a los acuerdos alcanzados entre sus realizadores Iñárritu y Lubezki, el Gobierno de la Ciudad de México, la Universidad Nacional Autónoma de México y los productores.