El primer museo dedicado en exclusiva a la artista contemporánea japonesa Yayoi Kusama abrió ayer sus puertas en Tokio, con una selección de piezas inéditas de esta creadora, que a sus 88 años continúa cultivando su inconfundible estética psicodélica.
Concebido por la Fundación Yayoi Kusama a iniciativa de la propia artista con el objetivo de promover y preservar su obra, el centro ofrece al público una inmersión total en el universo colorido y habitado por formas orgánicas en constante metamorfosis de una de las creadoras más cotizadas de la actualidad.
El flamante Museo Yayoi Kusama se ubica en el distrito tokiota de Shinjuku, cerca del estudio de la artista y del centro psiquiátrico donde reside, y ha sido especialmente diseñado para poner de relieve sus piezas, explicó el director del centro, Akira Akehata, en el acto de inauguración.
“La obra de Kusama ha sido expuesta en muchos de los grandes museos del mundo, y en las principales Bienales y Trienales. Sin embargo, creemos que un museo privado y originado de un concepto de la propia artista supone una oportunidad única para entender mejor su trayectoria única”, señaló Akehata.
“Hace mucho tiempo que quería crear este museo, y cumplir así mi sueño de que todo el mundo pueda ver mi obra”, dijo por su parte la artista a través de un videomensaje proyectado en la inauguración, y en el que apareció ataviada con una peluca naranja y un vestido a juego estampado con motivos de sus cuadros.
El museo, un estrecho edificio de cinco plantas y una superficie de 731 metros cuadrados, es un conjunto de módulos apilados inspirado en la arquitectura metabolista obra del estudio nipón Kume Sekkei y desde su exterior evoca la obra de Kusama con sus característicos lunares adornando la fachada.