Con un programa especial que captura el espíritu de 15 años de andanzas, la Compañía Mexicana de Danza Folklórica celebrará el próximo 18 de este mes sus tres lustros de actividad, con una función en la que buscan dejar claro que este género es mucho más que colorido maquillaje, listones de colores y trajes brillantes.
Alfredo Soni Perusquía y Raquel Barroso, directores de dicha compañía, recordaron que la danza folklórica habla de épocas, lugares, modas, encuentros y desencuentros, y permite que las pasiones, las historias, la tradición y la identidad de una nación sean contadas con el cuerpo, la piel y el corazón.
Así se podrá apreciar en este programa conmemorativo en el Teatro de la Danza, de Centro Cultural del Bosque (CCB), donde podrán apreciarse piezas como Danza azteca, Danza de negritos de Papantla, Región Huasteca, Sones y jarabes de Nayarit, Calabaceados vs. broncos y Sones y jarabes de Jalisco.
“Se trata de un breve recorrido por la historia de nuestra agrupación que, después de 15 años de andanzas, creando, reelaborando y aprendiendo de los bailarines, maestros, público y de la experiencia diaria, sigue reafirmando su filosofía”, comentaron los directores.
Explicaron que la mayoría de las coreografías que eligieron para esta celebración responde a la inquietud generada a partir del aprendizaje de dichos repertorios en la Escuela Nacional de Danza Folklórica (ENDF) del Instituto Nacional de Bellas Artes, al tratamiento escénico que otras agrupaciones han hecho de los mismos, a la huella que ha dejado en ellos lo que han experimentado de la cultura popular en carne propia y a su interés de llevar al escenario sus ideas.
La idea es transmitir a los espectadores el valor cultural de México frente a los problemas que lo acongojan.