Un equipo de biólogos australianos acaba de descubrir que el ADN de nuestras células no solo se organiza en la clásica forma de doble hélice que todos conocemos. Muy al contrario, otras estructuras más complejas y que hasta ahora solo se habían manifestado en muestras de laboratorio, han sido encontradas por primera vez en células vivas, en un hallazgo que podría cambiar la biología celular para siempre. ¿Qué son y para qué sirven estas nuevas estructuras? ¿Qué efectos tienen en el cuerpo humano? Nadie lo sabe por ahora. El estudio se acaba de publicar en «Nature Chemistry».
El descubrimiento de lo que los investigadores describen como un «nudo retorcido» de ADN en el interior de las células vivas confirma que el diseño de nuestro código genético es mucho más complejo e intrincado de lo que se creía.
En lo más profundo de las células de nuestro cuerpo yace nuestro ADN. La información escrita en su código (unos seis mil millones de letras A, C, G y T), proporciona instrucciones precisas sobre cómo se construyen y cómo funcionan nuestros cuerpos.
Desde que la estructura del ADN fuera descubierta por Watson y Crick en 1953, la icónica forma de la «doble hélice» ha cautivado la imaginación del público. Pero ahora sabemos que el ADN pueden organizarse, también, de maneras completamente diferentes. Aunque ignoramos el por qué y la función que podrían tener estas nuevas y sorprendentes estructuras.
El nuevo componente de ADN identificado por los científicos recibe el nombre de «motivo intercalado» (o «i-motif « en su acepción en inglés) y fue descubierto en la década de los noventa, aunque hasta el momento solo había sido visto in vitro y nunca en células vivas.
Ahora, gracias al trabajo de estos investigadores, sabemos que el i-motif ocurre de forma natural en las células humanas, lo que significa que a partir de ahora los investigadores deberán prestar mucha atención a esta nueva estructura y a su papel en la biología de nuestras células.