La disfunción eréctil o impotencia sexual es la incapacidad repetida de lograr o mantener una erección lo suficientemente firme como para tener una relación sexual satisfactoria, la eyaculación o ambas.
Un doctor del IMSS explicó que la erección es resultado de interacción entre los sistemas nervioso, circulatorio, el equilibrio hormonal y factores psicológicos; cuando alguno de éstos deja de funcionar adecuadamente ocurre la disfunción.
Este padecimiento, dijo, no es necesariamente una parte inevitable del proceso de envejecimiento, por el contrario, la causa más común es el daño a los nervios, arterias, músculos lisos y tejidos fibrosos.
A menudo, señaló, es el resultado de una enfermedad que puede ser diabetes, afecciones del riñón, alcoholismo crónico, esclerosis múltiple, arteriosclerosis, enfermedad vascular y neurológicas.
El cirujano urólogo del IMSS indicó que este padecimiento tiende a manifestarse también cuando un hombre presenta factores psicológicos, tales como el estrés o ansiedad; culpa, depresión, baja autoestima o miedo.
Por tal motivo se exhortó a la población masculina modificar hábitos alimenticios, así como forma de vida, para ayudar a minimizar el padecimiento.
De igual forma, recomendó solicite una cita con su médico, quien determinará el tipo de tratamiento que deberá llevar para ayudarle a recuperar su autoestima y su calidad de vida.
El doctor Álvarez Tostado recomendó evitar el automedicarse ya que muchos medicamentos para la presión arterial, antihistamínicos, antidepresivos, tranquilizantes y supresores pueden causar disfunción eréctil como efecto secundario.
Lo ideal, indicó, es acudir a su médico familiar en cuanto se presenten los primeros síntomas, quien determinará la necesidad de canalizarlo a un especialista o bien indicarle un tratamiento que le ayude a superar esta condición.