El Nobel de Medicina reconoció hoy los estudios para desarrollar la inmunoterapia contra el cáncer del estadounidense James P. Allison y el japonés Tasuku Honjo, que han establecido nuevos principios en la lucha contra esa enfermedad.
Su trabajo ha revolucionado el tratamiento contra el cáncer de pulmón o el melanoma y varios tipos en fase metastásica, cambiando de manera fundamental la forma de combatir ese mal, señaló en su fallo la Asamblea Nobel del Instituto Karolinska de Estocolmo.
Allison y Honjo demostraron, a partir de diferentes estrategias, cómo el sistema inmunitario puede usarse para luchar contra el cáncer, una idea que ya se empezó a discutir a finales del siglo XIX y principios del XX y ha originado investigaciones durante años, aunque sin que resultasen en nuevas estrategias terapéuticas.
Los descubrimientos de los nuevos nobel «constituyen un hito en la lucha contra el cáncer», dijo tras el anuncio el presidente del Comité Nobel de Medicina, el inmunólogo Klas Kärre.
Se trata de un enfoque «completamente nuevo porque, al contrario que estrategias anteriores, no está centrado en las células cancerosas, sino que lo hace en el sistema inmunitario», agregó.
Hasta ahora había tres pilares en el tratamiento contra el cáncer: quitarlo con cirugía, eliminarlo con radiación (radioterapia) o atacarlo con medicamentos que dañan las células cancerígenas.
Sin embargo, explicó lo descubrimientos de los nuevos laureados «han añadido un nuevo pilar en las terapias contra el cáncer, presentan un principio completamente nuevo» y además funciona en diferentes tipos de tumores.
Allison y Honjo ganaron en 2014 por sus descubrimientos en inmunoterapia el primer Premio Tang de Biotecnología Farmacéutica, uno de los cuatro campos que reconocen los galardones creados por un empresario taiwanés como una especie de «complemento» al Nobel y dotados con 1,33 millones de dólares.