El aceite de oliva es una grasa vegetal que se consume desde hace siglos y es la base de la cocina mediterránea. Este conserva todas las propiedades en el fruto: aroma, vitaminas, minerales, antioxidantes, entre otros. Además de ser un delicioso aderezo tiene muchos beneficios para la salud, por lo que se recomienda tomar una cucharadita cada día:
· Mejora la circulación de las piernas, lo que ayuda a evitar la formación de coágulos y con ello riesgos cardio y cerebrovaculares.
·Es excelente para tener una piel joven, ya que tiene virtudes cosméticas al hidratar, revitalizar, nutrir, purificar y alisar el rostro.
·Ayuda a reducir el colesterol malo, así como los triglicéridos, gracias a su contenido de ácidos grasos monoinsaturados.
·Mejora el nivel de azúcar en la sangre, por lo que es excelente para las personas que padecen diabetes, ya que una cucharadita es muy útil para controlar la glucosa en la sangre.
·Es un poderoso antioxidante, ya que se ha comprobado que consumir aceite de oliva previene la muerte celular, debido a sus componentes como los fenoles, que atenúan el envejecimiento, mejoran las funciones cognitivas y previenen enfermedades como el Alzheimer.
·Favorece la absorción de calcio y minerales como fósforo, magnesio y zinc, gracias a lo cual, tiene un efecto protector y revitalizante sobre el cabello y uñas.
(Fuente: La Crónica)
