La terapia de pareja tiene muchos estigmas, tabúes y genera fantasías, miedos y en muchas ocasiones hasta terror. Mucha gente pregunta: ¿Cuándo es el momento indicado para ir a una consulta terapéutica? La respuesta que siempre menciono es: justo en el momento en el que se le ocurrió por primera vez.
Actualmente la gente habla de una “crisis en los modelos actuales de familia y de pareja”. Vemos ahora una diversidad tremenda que hace apenas unos 40 años era impensable. Junto con esa diversidad tenemos un reto social que implica aceptar los reacomodos estructurales que implican estos cambios. Las parejas actuales tienen que lidiar con problemáticas que antes no existían o por lo menos eran menos demandantes.
Conflictos individuales, muchos de ellos marcados por sus familias de origen; decisiones de vida que muchas veces no han sido bien razonadas y muchas veces influidas por agentes externos. ¿Tener o no tener hijos, cuando es el momento indicado?. Relaciones conflictivas, muchas de ellas basadas en carencias emocionales que se manifiestan en relaciones dependientes, violentas o chantajistas.
La terapia de pareja interviene también en conflictos aun más complejos, como infidelidades, conflictos de poder o necesidad de control y dominio de la pareja, violencia física o psicológica o incluso la resolución de una separación o un divorcio racional, maduro y sensato.
Es importante recordar que la necesidad humana de cercanía, de compañía y afecto tiene su manifestación más grande en la pareja y en la familia. Somos seres sociales, y como tales buscamos identificarnos con otros semejantes. Dentro de estas elecciones y selecciones nos encontramos en el camino con personas que muchas veces marcan y determinan nuestra propia existencia.
Ahí es donde radica la importancia de la pareja. La terapia de pareja sirve para ayudar e resolver los conflictos anteriores siempre desde el entendimiento pensado. La voluntad de cambio en conjunto es una característica primordial en este proceso.
Acudir a una terapia de pareja brinda la oportunidad de delimitar un camino en común cuando muchas veces este se ha perdido o se ha vuelto difícil de andar. Marca la pauta para un reto de autoconocimiento a través del otro. Basado en aspectos esenciales como son el respeto, la tolerancia, la comunicación asertiva y sobre todo el amor.
Muchas veces las parejas “abandonan el barco” en la primera tormenta sin permitirse experimentar, aprender y crecer. Otras veces las parejas solo conocen “un solo camino” para intentar llegar a puerto, y en ese mismo camino han encontrado cansancio, hastió y han perdido emoción y asombro. La terapia de pareja promueve renovar la comunicación perdida o incluso crear nuevas formas de entendimiento. Ayuda a recuperar la confianza personal y plantea las bases de escucha y disposición en la pareja. La terapia de pareja nunca será una mala decisión, y siempre será una excelente solución.
Ricardo A. Morales Ordoñez. Terapeuta de parejas y familia. 044 55 35 00 14 80