Rocas lunares traídas por los astronautas de las misiones Apolo hace más de 40 años contienen evidencia de que un planeta del tamaño de Marte que los científicos creen se estrelló contra la Tierra y creó al satélite, mostró una nueva investigación.
Científicos alemanes que utilizaron una nueva técnica dijeron que detectaron una pequeña diferencia química entre rocas de la Tierra y material de la Luna. Los expertos dijeron que se necesitan más estudios para confirmar la esquiva evidencia de que material de otro cuerpo celeste además de la Tierra contribuyó a la formación de la Luna hace unos 4 mil 500 millones de años. Muchos en la comunidad científica creen que la Luna se formó de una nube de restos lanzados al espacio luego de que una Tierra joven chocara con un planeta del tamaño de Marte llamado Theia.
«Desarrollamos una técnica que garantiza una separación perfecta» de isótopos de oxígeno de otros gases, dijo Daniel Herwartz, de la Universidad de Colonia en Alemania.
Los resultados indican que la composición de la Luna es un 50 por ciento de Theia y un 50 por ciento terrestre, dijeron los científicos, aunque se necesita más trabajo para confirmar la estimación.