Javier Hernández vivió una noche inolvidable en Madrid. La noche soñada por el mexicano desde que supo, hace unos días, que le tocaría suplir al lesionado Karim Benzema. La noche que le instala para siempre en los altares del madridismo.
El Real Madrid se clasificó para las semifinales, tras un partido bronco, carente de futbol y en el que el Atlético no supo cómo disputarle el balón. El conjunto de Ancelotti, pese a las ausencias, fue superior y va a las semifinales para defender su título en vigor.
Además de dos conexiones entre James Rodríguez y Chicharito acabaron en dos remates poco afortunados del mexicano. También Cristiano Ronaldo y James probaron con un lanzamiento de falta desde la frontal. Pero como no podía ser de otra forma, la mejor ocasión del Real Madrid en este primer tiempo llegó de las botas del portugués.
A dos minutos del descanso, CR7 se aprovechó de un error garrafal del defensa para plantarse en la frontal y lanzar un disparo raso y envenenado que Oblak pudo desviar finalmente.
En el complemento de nuevo Chicharito fue el delantero más activo del Real Madrid, mientras que el Atlético se atrincheró; la mejor muestra, la posición de sus puntas. Mandzukic, empeñado en la labor de anular la creatividad de Toni Kroos. Y Griezmann cerrando el lateral izquierdo hasta que Simeone le dio el relevo por Raúl García a los 65 minutos.
La recta final quedó condicionada por la acción de Arda Turan. El futbolista turco realizó una fea entrada sobre Coentrao que le costó la segunda tarjeta amarilla y la expulsión. El Atlético se quedó con diez y perdió a uno de sus futbolistas más creativos.
El Real Madrid intentó aprovechar inmediatamente la ventaja y en la siguiente acción, al minuto 80, Chicharito tuvo una excelente ocasión pero el portero esloveno evitó el gol cuando ya lo cantaba el Bernabéu.
Sucedió lo que tenía que suceder. La presión madridista fue tremenda buscando una y otra vez a Chicharito que, finalmente, tendría su recompensa en el minuto 88.
Con el Atlético embotellado, James conectó con Cristiano Ronaldo que entró en el área por el carril del interior derecho para ceder al punto de penalti. Esta vez, sí, Chicharito encontró el hueco en la malla de Oblak para marcar el 1-0 que daba al Real Madrid una plaza en las semifinales.
“Chicharito, Chicharito”, rugió el estadio mientras el equipo entero se lanzó sobre el tapatío. Sólo entonces pidió su cambio. Con calma, cojeando, dejó su lugar a Jesé mientras salía ovacionado por el Bernabéu para, una vez en la banca, llorar a llanto tendido pues acababa de clasificar al Madrid a la semifinal de la Champions League.
“Esto es de todos, siempre lo he dicho, me tocó a mí ahora marcar ahora, pero es de todo el equipo… He estado muy paciente, mis compañeros confiando en mí, mi familia, mis seres queridos, todos han estado ahí. Este gol es para todos ellos”, fue la dedicatoria de Hernández, aunque guardó mesura. “Todavía falta, todavía falta”.
Se esfumó el sueño europeo rojiblanco ante los madridistas, de nuevo en la recta final del encuentro y tras una temporada de dominio del Atlético en los derbis de la Supercopa de España, la Liga y la Copa.
El campeón está, de nuevo, entre los cuatro mejores equipos de Europa.,
