Consumir un plato de brócoli hervido o al vapor aporta solo 40 kilocalorías. Esta verdura es fuente de fibra, no aporta grasas y contiene gran cantidad de agua que le otorga un gran poder saciante, por lo que no debe faltar en cualquier dieta de adelgazamiento.
Los nutriólogos los recomiendna especialmente a las personas veganas o ovo-vegetarianas por su aporte en calcio, nutriente que puede verse comprometido cuando no se consumen derivados lácteos. Su aporte en beta-carotenos o provitamina A y vitamina C, lo convierten en un poderoso antioxidante que ayuda a proteger y a frenar el envejecimiento prematuro de la piel, además de mantener hidratadas las mucosas internas. Es un alimento estrella para prevenir las enfermedades de tipo cardiovascular. El brócoli contiene sulforafano, una sustancia antioxidante muy beneficiosa para las personas que tienen enfermedades pulmonares, ya que ayuda a regenerar los tejidos dañados. Además, el brócoli aporta luteína, especialmente ineresante para prevenir los problemas de visión provocados por la degeneración de la mácula.