Una alimentación inadecuada puede propiciar irritabilidad, cansancio excesivo, falta de reflejos o de interés por las cosas, lo que a su vez genera estrés.
Indicó que en la actualidad, el estrés laboral es uno de los principales problemas para la salud de los trabajadores, lo que puede afectar su desempeño en las instituciones o empresas para las que laboran.
Ingerir alimentos de manera monótona, repetitiva o en la que falten comestibles indispensables para el cuerpo, puede dar lugar a la aparición de síntomas como cansancio excesivo, falta de reflejos y de interés por las cosas, así como irritabilidad.
Los expertos citan que hay factores alimentarios que influyen en el trabajo y en el rendimiento como las dietas hipocalóricas o bajas en calorías, ya que reducen la capacidad de rendimiento y perjudican la salud. Asimismo, las dietas desequilibradas en las que faltan alimentos básicos, ya que esto a medio o largo plazo dan lugar a carencias nutritivas con efectos indeseables para el organismo.
También las dietas hipercalóricas, conducen al sobrepeso y obesidad, aumenta el riesgo de lesiones en el aparato locomotor (músculos o articulaciones) y el de desarrollar otros trastornos como alteraciones de los niveles de azúcar, grasas en la sangre e hipertensión.
Es importante el reparto de la cantidad de alimentos por cada comida, ya que las ingestas escasas o abundantes, pueden producir hipoglucemias, somnolencia y molestias digestivas que perjudican el rendimiento tanto físico como intelectual.