Si existe un lugar en el mundo donde el tiempo parece detenerse esa es la isla privada de Lankanfushi en las Maldivas, un lugar romántico, exótico y divertido donde disfrutar del sol, el agua salada y la naturaleza todo ello en un alojamiento de lujo, el Gili Lankanfushi, considerado por los usuarios de Tripadvisor el mejor hotel del mundo 2015.
Alejado de la civilización y a 20 minutos en lancha del aeropuerto internacional de Malé, sus 45 amplias cabañas sobre el agua cristalina del océano Índico invitan a dejar a un lado los problemas y relajarse en este alojamiento ecológico atendido por un “mayordomo personal” que harán de la estancia un recuerdo inolvidable.
Las villas de unos 200 metros y ecológicas disponen de terraza privada, jardín acuático, TV vía satélite, reproductor de DVD, cafetera exprés y minibar. A pesar de estar en un isla privada y alejada del resto del mundo, el hotel Gili Lankanfushi dispone de todas las comodidades y avances de un hotel de lujo como por ejemplo conexión Wi-Fi gratuita; piscina al aire libre con vistas al mar y un elegante spa con suelo de paneles de vidrio que ofrece tratamientos ayurvédicos tradicionales y clases de yoga.
Pensando en aquellos que prefieren hacer otras actividades que las meras contemplativas al sol de las Maldivas, el establecimiento ofrece una amplia variedad de actividades que van desde hacer ejercicio en el gimnasio con las vistas más exóticos del mundo, hasta jugar al tenis, bucear o hacer excursiones de un día por la isla.
Mención aparte merece su oferta gastronómica. Tres nombres, By the Sea Japanese Restaurant -que ofrece marisco fresco y goza de vistas de 360 grados al océano Índico con una suntuosa variedad de los más frescos mariscos pescados usando las técnicas de tradicionales de las Maldivas- ; Main Restaurant & The Underground Wine Cellar and Chocolate Cave -un agradable lugar sobre la fina arena de la playa donde se sirve una gran variedad de bufés internacionales- y el Overwater Bar, una cabaña circular rodeada del océano donde disfrutar de los cócteles sobre camas balinesas.
Los usuarios del Gili Lankanfushi aseguran que es «un paraíso absoluto, con lo último en términos de comodidad y privacidad», «el personal te hace sentir cómodo y atendido. Las suites son preciosas. La habitación y el diseño de la terraza hacen de las vistas del Parque Nacional del Arenal y del jardín parte de la experiencia».