En la zona Parque Industrial de Puebla 2000 de esta entidad se inauguró la planta automotriz en donde inició la producción de Zacua, el primer auto eléctrico mexicano.
Luego del retraso por la reubicación de la planta tras el sismo de septiembre de 2017, las primeras unidades fueron lanzadas al mercado en mayo pasado.
Durante la inauguración, Jorge Martínez Ramos, presidente ejecutivo de Zacua, destacó que el primer vehículo eléctrico nació hace 18 años, cuando se pensó en las responsabilidades compartidas que tienen las personas, empresas y gobierno por contribuir a reducir los niveles de contaminación.
Abundó que la sociedad es quien tiene que construir a las ciudades y es por eso que se decidió iniciar el proyecto Zacua, como una solución a los problemas de movilidad, más que un producto.
Martinez Ramos dijo además que la producción será de manera casi artesanal, pues lo que se busca es que los vehículos atiendan las necesidades de los clientes, quienes hoy son pocos pero que en el futuro se incrementarán.
Indicó que los vehículos se ensamblarán con 40 por ciento de provendría local y 60 por ciento extrajera; sin embargo, la meta para el 1 de diciembre de 2019 es producirlo con proveeduría 100 por ciento local.
La motorización completamente eléctrica de Zacua está desarrollada por la empresa Dynamik Technological Alliance con un diseño de la firma francesa Chatenet, y posteriormente se buscará que el diseño sea totalmente mexicano.
Este año se planea producir la serie de lanzamiento de cien unidades; en 2019 se espera duplicar la producción y así ir incrementando paulatinamente hasta llegar a su capacidad potencial de dos mil unidades al año.
Con el inicio de la operación de la planta, se crearon 35 nuevos empleos, fundamentalmente en Puebla; la característica de esta planta es que el trabajo lo llevan a cabo solo mujeres, quienes ensamblarán un vehículo por día.
En el acto, el gobernador de Puebla, José Antonio Gali Fayad, destacó la inversión de casi 80 millones de pesos que se realizó en esta planta, lo que se traduce en empleos que poco a poco irán creciendo.