Sería genial poder dar algo a las personas que les permita saber qué hacer con sus residuos de plástico en lugar de tirarlos a la naturaleza. Debe reutilizarlo y no usarlo durante 30 segundos y desecharlo”, dijo el francés Christopher Costes, inventor de Chrysalis.
Quien junto a Earthwake diseñaron la máquina Chrysalis que es capaz de transformar 1 kg de plástico en 65% diésel, 18% de gasolina, 10% de gas utilizado para autoalimentar la máquina y 7% de carbón.
A Chrysalis le toma alrededor de de treinta minutos procesar cada kilo de plástico en 650 g de diésel y 250 g de gasolina.
A pesar de este gran avance, el equipo de Earthwake pretende seguir trabajando en una maquina similar, pero que sea capaz de contener una mayor cantidad de desperdicios.
“El siguiente paso, en un plazo de 3 a 6 meses, es fabricar una máquina más grande, fácilmente transportable a una zona contaminada, que sea capaz de tratar 70 kg de residuos por hora”, dijo Samuel Le Bihan actor miembro de Earthwake, quien estima que el coste de fabricación de una instalación de este tipo ronde los 56.800 dólares, con una amortización inferior a un año.