El 13 de septiembre de 1973 sería inaugurada la exposición Orozco. Rivera. Siqueiros. Pintura mexicana, en el Museo Nacional de Bellas Artes de Santiago de Chile; sin embargo, dos días antes se llevó a cabo un golpe de Estado. Tiempo después dicha idea artística fue retomada hasta conformar Orozco, Rivera, Siqueiros. La exposición pendiente.
La muestra, que estará hasta el 5 de mayo de 2019 en el Museo de Arte Carrillo Gil (MACG), está conformada por 60 piezas y fue originalmente pensada por el museógrafo, pintor, promotor cultural y diplomático Fernando Gamboa (28 de febrero de 1909-7 de mayo de 1990).
La exposición de Gamboa estaba conformada por 169 pinturas, grabados y dibujos de José Clemente Orozco, Diego Rivera y David Alfaro Siqueiros, las cuales iban a poder ser apreciadas en el Museo Nacional de Bellas Artes de Santiago de Chile.
Todas las obras a exponer se caracterizaban por pertenecer a la Colección Carrillo Gil, conjunto de piezas que, previamente a su paso por el país sudamericano, había tenido momentos complicados en otros países, como cuando camino a La Habana, la colección se quedó encallada en el Puerto de Veracruz (1946), o bien cuando iba camino a Bogotá (1948) se había dado El Bogotazo.
“Esta exposición es la concatenación de todos los elementos que hacen posible esta investigación, que no solamente habla de las piezas que fueron a Santiago en 1973, sino también de la relación diplomática que se generó entre Chile y México a partir de esta exposición”, explica Paula Duarte, directora del MACG.
Duarte señala que gracias a esta exposición pueden reflexionar sobre “cómo el arte nos lleva a caminos muy suntuosos donde involucran otro tipo de cosas”, puesto tras el golpe de Estado, Fernando Gamboa temía por las obras de arte.