Un informe señala a Portugal, Nueva Zelandia, Irlanda, Uruguay y Estados Unidos como los únicos países que han podido alcanzar 100% de conectividad en sus escuelas, siendo modelos a replicar a nivel mundial para transformar la educación a partir de internet. En América Latina, el más cercano es Uruguay.
«Todos parten de una clara visión de gobierno de transformar la educación mediante la digitalización y la conectividad; la implementación es rápida y eficaz (tomó entre 3 y 5 años); hay diferentes fuentes de financiamiento, y la tecnología no solo se queda en llevar conectividad a la escuela, sino en impactar los procesos de enseñanza en las aulas de clase,” precisó Andrés Maz, director de Política de Tecnología Avanzada de Cisco en un comunicado de prensa.
En el comunicado, el directivo de Cisco apunta que, aunque varios países han intentado conectar sus escuelas, la falta de internet de banda ancha no ha permitido que este llegue a las aulas, por lo que aseguró que el punto es la forma en cómo están conectadas.
La calidad de la conexión, la extensión de la red local (LAN) en el interior de la escuela, una red de área amplia (WAN) que conecte a las instituciones con otras instalaciones educativas del distrito, así como la instalación de “routers “dentro de los edificios escolares, los enlaces físicos a internet, los servicios administrados en forma central (firewalls o filtrados de contenidos) y la banda ancha en cada aula y en cada equipo (computador, tableta, escáner, impresora, monitor, pizarra electrónica), son algunos de los aspectos que Cisco recomienda tomar en cuenta para poder alcanzar el objetivo de conectar los centros educativos.
En el caso de Uruguay, Cisco cita que en aquel país sudamericano 2,453 escuelas están conectadas gracias a una inversión de 238 millones de dólares a través del Plan Ceibal, un programa de inclusión tecnológica y social implementado en 2008.
En Estados Unidos hay 98,328 escuelas conectadas y casi 50 millones de estudiantes beneficiados en un periodo menor a los cinco años.
Cisco considera que la tecnología en la educación ayuda a tener más acceso a materiales, mayor capacidad de aprendizaje en alumnos y de capacitación en los profesores, además de mejorar la utilidad de las TIC en los centros educativos, facilita el aprendizaje a distancia o por medios electrónicos, así como un mayor nivel de colaboración entre alumnos y docentes más allá de las aulas.
La empresa con sede en San José, California, busca elevar las políticas de conectividad a internet de alta velocidad en banda ancha, además de crear programas nacionales de conectividad exitososos en países en desarrollo, donde la disponibilidad de redes LAN en las escuelas secundarias públicas es limitada y no hay información sobre la amplitud de la cobertura en las escuelas.