La compañía norteamericana ahora tiene una patente para un teléfono que en realidad se supone que se puede doblar.
Entre las 28 patentes que le fueron concedidas a Apple este martes está una para un «dispositivo electrónico flexible» y otra para una tecnología de gafas inteligentes que podría desafiar a Google Glass. Las patentes ofrecen una pista respecto a qué aparatos son los que Apple podría estar preparando.
¿Recuerdas el bendgate, cuando hubo alboroto en las redes sociales gracias a varias quejas acerca de que el nuevo iPhone 6 Plus se doblaba al estar en los bolsillos de las personas?
Apple dijo que el problema era «extremadamente poco común», pero el episodio puso de manifiesto un ejemplo de cómo un teléfono o tableta no tan rígida podría resultar útil.
«Los dispositivos electrónicos rígidos pueden dañarse con facilidad al sufrir un impacto como una caída en una superficie dura», explica la patente. «Por lo tanto, sería conveniente tener la capacidad de brindar aparatos electrónicos mejorados».
Los ingenieros de Apple ya se han dado a la tarea de proteger las partes más vulnerables del teléfono (como la pantalla) de una caída. Ellos han descrito una tecnología que permitiría que los teléfonos giren mientras están en el aire.
La nueva patente incluye dos docenas de dibujos que muestran cómo un dispositivo —por ejemplo, un iPhone de Apple— podría ser pandeado y retorcido. Esto podría incluir pantallas flexibles, baterías flexibles y placas de circuitos flexibles.
Estas son algunas de sus consideraciones: cómo el dispositivo estaría plano, al no haber fuerzas que lo flexionen; cómo hacer que capas «se traslapen y deslicen» una sobre otra, entre los materiales flexibles para la construcción podrían utilizar papel, y cómo colocar la unidad central de procesamiento en una «parte central rígida para impedir que la CPU se dañe al doblarse el dispositivo».