La ciudad de Panamá, Panamá, se ha convertido en los últimos años el corazón de la economía de más rápido crecimiento en América Latina. De acuerdo con un informe del Fondo Monetario Internacional (FMI) publicado en marzo de 2013, la economía panameña creció un promedio del 8.5 % en los últimos diez años, lo que el país centroamericano uno de los preferidos de los negocios y el mundo empresarial.
La prosperidad se debe en gran parte a los ingresos generados por el Canal de Panamá. Administrado por EU, desde su inauguración en 1914, el canal quedó bajo el control del Gobierno local en 1999. Desde entonces, la economía panameña se ha beneficiado del aumento dramático en el comercio entre los países del norte y del sur con China.
El aumento de la riqueza se refleja en las calles de la capital, que hoy es el centro financiero más importante de Centroamérica. En la última década, los barrios de Punta Tocumen y Punta Pacifica están llenos de rascacielos, dos de los cuales ya están en la lista de los 200 edificios más altos del mundo. La proliferación de estos edificios, hoteles de lujo, casas y oficinas de los principales bancos y corporaciones multinacionales, se le ha dado a Panamá el apodo de «Dubai latina».