El penal de Islas Marías, la única isla en el continente utilizada como cárcel y que se encuentra en territorio mexicano, dejará de albergar a 200 reos y sus familias para convertir el espacio en un centro para el cuidado del ambiente y la cultura, según anunció el presidente .
Este mes, el mandatario firmó un decreto que establece el fin de la cárcel y el desarrollo de este nuevo proyecto que llevará por nombre «Muros de Agua: José Revueltas».
Estas son las claves para entender cómo operaba la cárcel y cuál será el proceso de transformación a un lugar reservado para la cultura:
Las Islas son un grupo de islas que se localizan en el océano Pacífico a 112 km de las costas del estado mexicano de Nayarit.La más grande, llamada María Madre, alberga la Casa Penal Federal Islas Marías, una cárcel sin rejas que fue creada en 1905 por el entonces presidente Porfirio Díaz.
Durante los primeros años, albergó a los peores criminales de la época, pero al paso del tiempo se convirtió en una cárcel para presos de baja peligrosidad. A partir de 2009, el Gobierno mexicano impulsó un sistema de prisión abierta para criminales con un mismo perfil clínico para que pudieran vivir allí con sus propias familias.
En conferencia de prensa, López Obrador precisó que en esa prisión federal hay a la fecha 600 internos de baja peligrosidad, de los cuales 200 quedarán en libertad en los próximos días. Los otros 400 reclusos serán reubicados en centros de readaptación social que estén cercanos a sus lugares de origen y a sus familias.
En lo que respecta a los trabajadores, precisó en conferencia en Palacio Nacional que también serán reubicados en penales y cárceles cercanas a sus domicilios.
Se convertirá en un centro para las artes, la cultura y el conocimiento sobre el medio ambiente y la naturaleza, la flora, la fauna de esas y las otras islas de alrededor.
Josefa González Blanco Ortiz Mena, secretaria de Medio Ambiente y Recursos naturales (Semarnat), informó que se organizarán expediciones de estudiantes, de niños, niñas y jóvenes y además habrá talleres formativos en los que los muchachos podrán realizar prácticas profesionales en la reserva natural.
De acuerdo González Blanco, entre las actividades que se buscan implementar en este nuevo centro estarán la capacitación en técnica de supervivencia y monitoreo de flora y fauna, estudios socioambientales, estudios literarios, actividades de teatro, escritura creativa, arte transformativo y actividades deportivas.