La muestra “Miguel Cabrera. Las tramas de la creación” es una mirada a la propuesta estética que hizo el artista plástico en el siglo XVIII, con la cual plasmó la espiritualidad de la Compañía de Jesús, uno de sus principales patronos, sobre todo en el actual Museo Nacional del Virreinato, en Tepozotlán, Estado de México.
En la muestra, que se inaugura el 7 de noviembre en el Claustro Bajo de los Naranjos del Museo Nacional del Virreinato, en Tepotzotlán, se exhibirán 71 piezas, 45 de las cuales son pinturas, 17 libros, 4 documentos y 5 esculturas, y destaca el óleo sobre tela La Sagrada Familia y el hermano Pedro Basto, de 1752, en el que se representa a San José con el niño en brazos y la Virgen María acompañados por ángeles con azucenas. En el extremo inferior izquierdo se observa un hombre vestido con sotana negra y una cartela con una inscripción latina que lo identifica como el hermano Pedro Basto.
La exposición, señala el INAH en un comunicado, refleja el vínculo entre el pintor y esta orden religiosa.