La primera edición de Ruido Fest está prevista del 10 al 12 de julio en el Addams Park con bandas de Latinoamérica y Estados Unidos.
“No había un festival de música latina y más que nada para audiencia joven y pensamos que sí hay gente para este tipo de música, no solamente de aquí de Chicago, queremos pensar que vendrá gente de otras ciudades”, dijo el miércoles en entrevista telefónica Eduardo Calvillo, uno de los organizadores del evento.
Si bien los grupos latinoamericanos cada vez más tienen convocatoria en los festivales estadounidenses, el organizador lamentó que aún no sean considerados estelares.
“Desafortunadamente las bandas latinas que han tocado en Lollapalooza siempre los ponen a tocar a las 12:00 del día cuando toda la gente está llegando”, dijo Calvillo, quien es originario de San Luis Potosí y residente en Estados Unidos.
Los organizadores esperan recibir 10 mil personas por día, aunque esta cifra es conservadora tomando en cuenta que algunos de los grupos pueden reunir fácilmente a 5 mil asistentes en Estados Unidos y hasta a 50 mil en México, como lo ha hecho Zoé en sus conciertos en el Foro Sol capitalino.
Entre otras agrupaciones confirmadas se destacan Cardiel y La Vida Bohème de Venezuela, La Armada de República Dominicana y Los Rakas de Panamá. Los boletos comenzarán a venderse el sábado en el sitio ticketfly.com.
“Teníamos más de dos años tratando de planear esto pero lo queríamos hacer bien”, apuntó Calvillo. “Queríamos traer a algunos artistas ya establecidos y, la parte más importante, desarrollar a nuevos artistas para que la gente que vive en Estados Unidos y es de origen latino tenga un poco más de conocimiento de esto”.
“Lo que nos interesa más es tener lo que ha hecho a otros festivales exitosos: un buen servicio a los asistentes, atención a los detalles, no sólo la música sino la comida, los stands, los patrocinadores… Se trata de toda la experiencia de estar al aire libre en esta realidad alternativa que estamos creando”, dijo Max Wagner, otro de los organizadores.
El evento se realizará en una zona artística y latina de la ciudad, el barrio de Pilsen, y por eso también habrá un espacio para que artistas locales expongan su obra en el Addams Park, que con Ruido Fest se estrena como un espacio público para festivales.
“Es parte de la cultura aquí y de por qué me gusta Chicago. Los inviernos son largos y duros, pero cuando llega el verano la gente inmediata e instintivamente quiere estar fuera, quieren estar en las calles y no creo que sea coincidencia que la industria de los festivales sea tan buena”, apuntó Wagner.