Científicos en Brasil preparan la agricultura de su país para enfrentar los efectos del cambio climático y poder adelantarse a la llegada de plagas que ya golpean a los países vecinos. “Tenemos 400 investigadores que actualmente trabajan para adaptar nuestra agricultura al cambio climático. Tenemos un clima tropical, y ese es el primero que resulta golpeado con estas variaciones”, dijo Mauricio Lopes, presidente de Embrapa, la estatal Empresa Brasileña de Investigación Agropecuaria. Si la temperatura se eleva, “en 30, 40, 100 años, ¿qué va a suceder con el proceso de adaptación de nuestros cultivos? ¿Para dónde vamos a tener que mover el café, la soja, la caña de azúcar y el maíz? Estamos haciendo un trabajo cuidadoso de anticiparnos a los impactos que cambio climático puede tener en las zonas donde adaptamos los cultivos”, agregó.
Precisó que la idea es anticipar material genético adaptado o resistente al nuevo clima. “Si ocurre el cambio climático, queremos saber cómo podemos mejorar y anticiparnos”. Para Embrapa, el tema también pasa por generar una agricultura sostenible a través de los programas públicos de agricultura de baja emisión de carbono, destinados a una menor emisión de gases.