Muchas personas en el mundo sufren de fibrilación auricular, enfermedad caracterizada por unos latidos descoordinados de las aurículas del corazón. En consecuencia, los afectados presentan un ritmo cardiaco rápido e irregular, lo que aumenta en gran medida su riesgo de padecer episodios cardiovasculares potencialmente mortales, caso del infarto de miocardio y, sobre todo, del ictus. De ahí la necesidad, vital, de tratar esta fibrilación auricular. El problema es que para localizar del origen de esta arritmia se debe recurrir al cateterismo, es decir, a la inserción de un catéter hasta el corazón. Sin embargo, investigadores del Hospital General Universitario Gregorio Marañón de Madrid y de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) han desarrollado y patentado un dispositivo que permite encontrar la causa de las arritmias de una forma mucho más barata y, sobre todo, menos invasiva.
Como destacan los investigadores, «el nuevo dispositivo permite localizar el origen de las arritmias sin necesidad de realizar un cateterismo. Así se puede conocer qué paciente se puede beneficiar de una ablación, concretar el tipo adecuado de intervención y determinar la zona a tratar».
Las arritmias auriculares son ciertamente comunes en la práctica clínica. Muy especialmente la fibrilación auricular, el tipo de arritmia más frecuente y que padece hasta un 10% de la población mayor de 65 años. Y para tratar esta arritmia, el tratamiento habitual es la ablación por radiofrecuencia, técnica consistente en la introducción de un catéter en las cavidades del corazón para localizar y destruir las áreas de tejido que originan las señales eléctricas anormales que causan la arritmia.
Por tanto, el conocimiento del origen de la actividad eléctrica auricular es de vital importancia para el diseño de una estrategia de tratamiento eficaz. Sin embargo, como indican los investigadores, «por lo general, el cardiólogo no dispone de esta información hasta que no se han introducido los catéteres dentro del paciente en el transcurso del mismo procedimiento de ablación».
En este contexto, el nuevo dispositivo combina un chaleco con electrodos distribuidos sobre la superficie del torso del paciente y un software específico que permite determinar el origen de la arritmia antes de realizar el estudio electrofisiológico invasivo con catéter. O lo que es lo mismo, evita la necesidad de recurrir al cateterismo, procedimiento que, si bien seguro, no está exento de riesgos para los pacientes.
Es más; además de evitar las ‘molestias’ y posibles complicaciones para los pacientes, el dispositivo también reduce el tiempo de quirófano que necesita el cateterismo, lo que abarata el procedimiento tanto diagnóstico como terapéutico.