Ayer por la tarde India lanzó la nave espacial Mangalyaan desde una pequeña isla cerca de Chennai, en la costa sur del país. Le tomará 11 meses a la nave llegar a la atmósfera del frío e inhóspito Marte, al viajar 225 millones kilómetros desde la Tierra.
El primer ministro indio, Manmohan Singh, anunció los planes para la misión durante un importante discurso en agosto del 2012, pocos meses después de que el intento chino para enviar un satélite orbital en una misión rusa fracasara. Los planes plantearon la idea de una nueva carrera espacial en Asia.
El programa espacial de India, que apenas tiene medio siglo de edad, ha sido durante mucho tiempo una fuente de orgullo nacional, especialmente en los últimos años, al tiempo que el país, el cual se moderniza rápidamente, elevó sus ambiciones más allá de la tecnología de satélites hasta viajes lunares y planetarios.
Una sonda no tripulada que India envió a la Luna en el 2008 contenía un instrumento científico (financiado por Estados Unidos) que detectó agua atrapada en las rocas lunares.
Sin embargo, el programa espacial no ha estado exento de críticos, quienes se preguntan por qué el país está gastando 74 millones de dólares en viajes interplanetarios, mientras que millones de sus habitantes siguen siendo pobres y desnutridos.
(Fuente: El Economista)