En el Instituto Politécnico Nacional (IPN) desarrollan un sustituto de piel a fin de reducir el tiempo de curación y disminuir las cicatrices causadas por quemaduras o heridas que se complican a causa de la diabetes.
Josué Jiménez Vázquez, del Centro de Investigación en Ciencia Aplicada y Tecnología Avanzada, unidad Legaria, confía en que este año se tendrá el producto en el mercado. Hasta el momento ha realizado pruebas in vitro.
El maestro en tecnología avanzada explicó que los andamios son estructuras constituidas por colágeno y elastina, que funciona como soporte de los tipos celulares incorporados mediante nanotecnología.
En México es la primera vez que se usa la nanotecnología para crear un sustituto de piel, conformado por el andamio y las células queratinocitos y fibroblastos, precisó.
Se consiguió a través de la extracción de colágeno de piel de pollo, el cual fue purificado y liofilizado. Se desarrollaron nanofibras con él para construir los andamios, simulando la matriz extracelular, donde se cultivan los queratinocitos y fibroblastos.
El doctor Eduardo San Martín Martínez, asesor del proyecto, indicó que otra de las ventajas de la piel sintética es que al aplicarla sobre las heridas frescas se absorbe el andamiaje, biocompatible y biodegradable. Esto hace que al regenerarse, la nueva piel tenga vascularización y desarrolle sensaciones nerviosas y circulación en la sangre.
Jiménez Vázquez señaló que con ayuda de San Martín Martínez, su sueño de crear un material con propiedades similares a la telaraña se consolidó.