Con biotecnología elaborada a partir de desechos orgánicos, la científica del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional (IPN), Refugio Rodríguez Vázquez, rehabilita chinampas del canal de Cuemanco contaminadas con plaguicidas organoclorados. Su objetivo es convertirlas en suelos aptos para cultivos orgánicos.
La especialista del Departamento de Biotecnología realiza el proyecto enfocado a promover la agricultura sustentable con el apoyo de la organización no gubernamental Yolcan.
Rodríguez Vázquez cuenta con la única patente mexicana para biorremediación de suelos, la cual emplea granos verdes de café y café gastado para la restauración. Con la finalidad de ensayar en el laboratorio la eliminación de los plaguicidas, su equipo adaptó dicha tecnología en sustrato sólido y sustituyó la materia orgánica original con cáscaras de naranja. Los resultados fueron positivos.
Para las pruebas de laboratorio combinamos los residuos del fruto con pequeñas cantidades de nitrógeno, fósforo y agua, a los ocho días comenzamos a apreciar la degradación, después de 16 días la remoción fue total, explicó la investigadora.
La aplicación de la técnica de remediación biológica recién comenzó en una de las chinampas; se llevará a cabo en otras 10, y existe la posibilidad de extenderla a más áreas de cultivo.
También se capacitará a los agricultores del lugar. El equipo de investigadores lleva un seguimiento quincenal para evaluar la proceso. Dependiendo de los resultados, determina los ajustes y, de requerirse, programa una segunda aplicación para remover la totalidad de contaminantes, con el propósito de tener espacios aptos para cultivos.
La investigadora del Cinvestav-IPN señaló que las chinampas podrían estar contaminadas los primeros 50 centímetros de profundidad, distancia a la que generalmente impactan los agroquímicos. Hicimos muestreos a 30 centímetros de profundidad y encontramos la presencia de varios plaguicidas organoclorados, afirmó.