Arqueólogos españoles y guatemaltecos descubrieron en el norte de Guatemala el primer mural maya pintado con la técnica al fresco que data del siglo VIII. “Es una pintura al fresco, como los frescos italianos del renacimiento, no una pintura al seco como es habitual en todos los murales mayas hasta ahora conocidos”, explicó la española Cristina Vidal, directora científica del sitio arqueológico La Blanca donde tuvo lugar el hallazgo.
De acuerdo con Vidal, este es el primer mural localizado donde el pintor de la civilización maya “diluyó” los pigmentos en agua para realizar trazos más libres y naturales similares a los que utilizó “Miguel Ángel en la Capilla Sixtina”. La directora del proyecto explicó que aunque el descubrimiento es una “novedad”, no descartó que existan más murales de este tipo en la región donde se encuentran zonas que han sido poco exploradas. El mural, que representa una entrega de ofrendas, muestra una escena con varios personajes masculinos, femeninos, niños y ancianos con una banda de jeroglíficos, detalló.
