Amigos, familiares y conocedores de la obra del escritor mexicano Carlos Fuentes (1927-2012) le rendirán un tributo el próximo sábado, en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, para recordarlo con la lectura de algunas de sus obras, a cuatro años de su muerte.
Los escritores Federico Reyes Heroles e Ignacio Padilla, la cantante Cecilia Toussaint y su viuda Silvia Lemus, leerán fragmentos de sus textos póstumos: “Federico en su balcón” (2012), “Pantallas de plata” (2014), “Personas” (2012) y “Aquiles o el guerrero y el asesino”, próximo a publicarse.
El narrador, ensayista y dramaturgo mexicano dio a luz una amplia obra que hoy es un referente de conocimiento del lenguaje y de la capacidad narrativa con la que creó universos que van del tema histórico a lo sobrenatural.
La periodista y escritora Silvia Lemus, viuda de Fuentes, explicó que el homenaje lleva por título “Carlos Fuentes está hoy aquí”, porque estará con tres libros publicados “post mortem”, con los cuales cumplen su deseo de “Quiero morir escribiendo”.
La Coordinación Nacional de Literatura del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) recordó que Fuentes fue reconocido con premios tan importantes como el Internacional Don Quijote de la Mancha 2008 por su trayectoria y su labor como impulsor de la lengua y la cultura hispanoamericanas.
El Internacional Alfonso Reyes 1979, el Príncipe de Asturias 1994, el Nacional de Ciencias y Artes 1984 en el área de lingüística y literatura, el Real Academia Española de Creación Literaria 2004 por En esto creo y el Xavier Villaurrutia de Escritores para Escritores 1976 por Terra Nostra.
Entre su obra figuran, en cuento: “Los días enmascarados” (1954), “Chac Mool y otros cuentos” (1973) y “El naranjo o los círculos del tiempo” (1993); en ensayo: “La nueva novela hispanoamericana” (1969), “Valiente mundo nuevo. Épica, utopía y mito en la novela hispanoamericana” (1991) y “Los 68. París, Praga, México” (2005).
En teatro son de su autoría “Todos los gatos son pardos” (1970) y “Ceremonias del alba” (1991), y en novela: “La región más transparente” (1958), “Aura” (1962) y “Las buenas conciencias” (1959), por mencionar solo algunas.