Por: Guillermo Cornejo @MemoCornejo
En los últimos años el mundo del futbol ha llamado mucho la atención, y no precisamente por la pasión que desata entre las personas, sino por las cantidades estratosféricas que se manejan entre la compra y venta de jugadores de los principales clubes en el orbe.
Basta nombrar a clubes como el Real Madrid, Barcelona, Manchester United, Milan; a ellos siempre los hemos conocido como los grandes del futbol europeo debido a su gran capacidad de atraer a las nuevas joyas del deporte, de crear y moldear a las futuras promesas del futbol; y si ellos no las tienen, poseen la capacidad de comprar a casi cualquier jugador que les plazca. Estos eran los equipos que, hace cinco años aproximadamente, pensábamos tenían más riqueza o poderío económico en el mundo.
Los “nuevos ricos” han estado apoderándose del mercado de traspasos y transferencias armando una guerra de billetes para ofrecerlos al mejor jugador; estos clubes acaudalados son el Manchester City, Paris Saint Germain y recientemente el AS Mónaco.
La característica que comparten estos clubes es que han sido adquiridos por personajes muy importantes del mundo árabe, por lo que echan mano de sus riquezas para comprar a jugadores que creíamos no saldrían de su entonces equipo hasta que estuvieran a punto de culminar su carrera.
El caso más sonado de estos clubes fue el del AS Mónaco, un equipo recién ascendido de la segunda división francesa que empezó a adquirir algunas de las máximas figuras del futbol europeo. Un caso concreto es el de Radamel Falcao, por él ofrecieron la jugosa cantidad de 60 millones de ueroes (nada mal para el equipo Benjamín de la Ligue 1). Además no se detuvieron ahí, también adquirieron los servicios de James Rodríguez, Joao Moutinho, Jeremy Toulalan y Eric Abidal.
El mundo nos mantenía acostumbrados a que en cada mercado de fichajes de verano hubieran dos o tres denominados “fichajes bomba”, los cuales su precio apenas era superior a los 30 millones de euros.
En este último mercado de transferencias vimos nombres muy importantes cambiar de equipo: tal es el caso de Neymar (Santos-Barcelona), Özil (Real Madrid-Arsenal), Cavani (Nápoles-PSG), Illarramendi (Real Sociedad-Real Madrid), y por supuesto, el gran Gareth Bale(Tottenham-Real Madrid) colocándose en el segundo traspaso más caro de la historia del futbol con 91 millones de euros.
No sabemos hasta donde vamos a llegar en un futuro (no tan lejano) en cuanto a las transferencias de las joyas europeas y latinoamericanas, solo un recordatorio a todos los dirigentes de los clubes: Nunca olviden la pasión que las personas le tenemos al futbol.