Según una encuesta realizada por las revistas Time Out (en su edición inglesa) y Entretainment Weekly, estas son las diez mejores películas de terror que se han producido en el cine occidental. ¿Tú ya las viste? ¿Cuáles son tus favoritas?
El despertar de los muertos (1974)
Dir. George Romero
El director se ha convertido en una fábrica de zombies. Hay que recordar que Romero fue, en un primer momento, dudó sobre la idea de hacer una secuela de su La noche de los muertos vivientes, de 1969. Sin embargo, con su proyecto más personal (y, tal vez, su obra maestra), Martin (1976) , fallando miserablemente en la taquilla, Romero decidió hacer de tripas corazón y revitalizó su carrera en el proceso.Aunque El despertar de los muertos cambió la cara de horror, esta es la película que también será recordada como el más salvaje y más delirantemente excitante filme de zombies de todos los tiempos. La película prácticamente define el concepto de cine de terror con conciencia social y políticamente astuto. Su influencia se ha dejado sentir en todas las películas de zombies, incluso en la televisión en la serie The Walking Dead.
Suspiros (1976)
Dir. Dario Argento
Sus jugadas violentas mezcladas con un barroquismo visual se acentúan aún más con su soundtrack. Este filme tiene una clara influencia en el cine de John Carpenter y Darren Aronofsky, cuyas referencias son claras. La llegada de la bailarina americana en una escuela de ballet alemana coincide con un doble asesinato impactante. En medio de una atmósfera de histeria adolescente y toques de ocultismo dan paso a la revelación de que los profesores de la escuela son parte de una antigua secta de brujas.Mediante el uso de filtros de color y la iluminación forzada, Argento empujó la artificialidad de la antigüedad del Technicolor a la creación de un ambiente cinematográfico que permitió una sensación visual y sonora pura.
http://www.youtube.com/watch?v=7Q_o-iV_L2A
Halloween (1978)
John Carpenter no se equivoca al crear a este descuartizador. Desde la primera escena en la que el joven psicópata Michael Myers al saludar a sus padres con un cuchillo ensangrentado en la mano anunciando su inevitable regreso una década después. Esta secuencia es una lección magistral de cómo inquietar al espectador. Utilizando el entonces nuevo sistema Steadycam, Carpenter fue capaz de darnos una perspectiva desde el punto de vista del asesino. Pero el director no se detuvo allí, pues haciendo pleno uso de sus talentos musicales, también escribió el tema principal, una «melodía de piano de estilo el Exorcista” que causa verdaderos escalofríos.
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El bebé de Rosemary (1968)
Dir. Roman Polanski
Es bastante difícil moverse de vecindario y tratar de formar una familia y tener que luchar con la sospecha de que tus nuevos vecinos podrían ser satánicos y que han engendrado un bebé demoniaco a través de ti. Esta es la cara inteligente y sutil del horror de Polanski, quien cuida los detalles y nos mantiene en tensión sobre todo en cuanto a lo que sucede en la mente del personaje de Mia Farrow (Rosemary). Hay algunas escenas clave más explícitas – una posible violación de noche y un clímax escalofriante – que sirven para llegar justo debajo de nuestra piel sin que la premisa parezca ridícula. Farrow y de Cassavetes, con sus grandes actuaciones, provocan que la vida cotidiana de la familia parezca lo más horrible y que las canciones de cuna evoquen momentos de terror, haciendo que todo el asunto se sienta doblemente espeluznante.
La cosa del otro mundo (1982)
Dir. John Carpenter
Viajar en el tiempo tiene muchas ventajas, pero algo de los más agradable sería viajar de nuevo a 1982 y decirle a John Carpenter que su nueva película algún día alcanzará el sexto lugar en la lista de las 100 mejores películas de terror, incluso superando su icónica Halloween. The Thing (La cosa del otro mundo) fue odiada en el primer lanzamiento, considerado como un clon de Alien por la crítica que estaba más interesada en ampliar los límites de la ciencia ficción que en el carácter o la tensión de la historia.
Este filme fue un fracaso desastroso y amenazó la reputación de Carpenter como “el rey del nuevo horror”. Es difícil de imaginar ahora con la perspectiva del tiempo que The Thing ha surgido como uno de los terrores modernos más potentes, combinando el frío de la sospecha y la incertidumbre de la imaginación.
Alien: el octavo pasajero (1979)
Dir. Ridley Scott
Cuando Alien fue lanzada, las películas de ciencia ficción estaban de moda. La tendencia se había iniciado dos años antes con el éxito de Star Wars, y , en 1979 , todo lo relacionado remotamente con el espacio y/o extraterrestres se garantizaba para recaudar dinero. Alien tenía una ventaja, que era tanto horror como la ciencia ficción. La saga de Scott siempre tuvo un ambiente inquietante, además de ser la primera película de su clase, al conjugar, elementos espaciales con el terror y el suspenso.
Psicosis (1960)
Dir. Alfred Hitchcok
Hitchcock fue un innovador inquieto, y Psicosis roía los bordes del gusto y la decencia por estar muy por delante de su tiempo: la combinación de independiente y sexualmente directa rubia de la película, sus escenas slasher y su solitario agresor masculino, enloquecido y motivado por un entorno familiar inquietante, dio a la película una modernidad que la diferencia de la mayoría de los filmes de Hitchcock. Psicosis merece un lugar tan alto en esta lista por su influencia y potentes imágenes: la escena de la ducha legendaria todavía impacta al público. Esta película inició un cambio en el apetito de las audiencias para experimentar los extremos sentimientos en el cine.
Masacre en Texas (1974)
Dir. Tobe Hooper
Hay películas de terror que se doblan a los límites del género, que se ocupan de los aspectos psicológicos, y la temática sutil – y hay los que ponen al horror cara a cara con el espectador- circunstancias terribles que amenazan con vaciar el cuerpo y bloquear la mandíbula. Este filme es uno de estos. Ha habido secuelas y remakes y muchos directores que buscan robar la idea en la que gente extraña que vive en el bosque y un matadero local, pero, seamos claro, aquí es donde esta historia empezó. Sus métodos y asuntos son fundamentales: los niños inocentes una casa espeluznante en el bosque, la noche persigue a través de los árboles, el sonido de la motosierra, la máscara del asesino … Este es peligro de alta energía, justo hasta que llega la escena final, frenética y rápida como el amanecer.
http://www.youtube.com/watch?v=Vs3981DoINw
El resplandor (1980)
Dir. Stanley Kubrick
Los momentos más aterradores de El Resplandor son tan icónicos que se han convertido en chistes. Por ejemplo, Jack Nicholson lanzando miradas lascivas en carteles pegados a las paredes de dormitorios con la leyenda: “Aquí está Johnny”. Aún así, la obra maestra de la ejecución y la claustrofobia de Stanley Kubrick aún conserva el poder de asustar al público pese al paso del tiempo. Nicholson es Jack Torrance, un escritor que trabaja como conserje en el Hotel Overlook aislado en las montañas de Colorado durante el invierno. Stephen King, en cuya novela se basó la película, no fue impresionado por la maestría de Kubrick. El problema, dijo, es que el director era «un hombre que piensa mucho y se siente muy poco». Le molestaba que Kubrick separara los elementos sobrenaturales de su historia. Torrance no es torturado por los fantasmas, sino por la desadaptación y el alcoholismo. Y para muchos, este filme es un estudio de la locura y el fracaso, haciendo que sea muy escalofriante.
El exorcista (1973)
Dir. William Friedkin
Por los años setenta el horror estaba dividido en dos campos: por uno, había terrores de la «vida real» y, por otro, el horror de los sueños. La primera película que trató de llevar a los dos tipos de horror juntos fue El bebé de Rosemary, pero el corazón de Polanski pertenecía claramente a una tendencia más surrealista por eso no logra una absoluta certeza con la unión.
Hasta que llega Friedkin y crea una película de terror como ningún otro brutal y hermosa, ingeniosa y explosiva. La exploración de conceptos religiosos fue hecha con precisión clínica de un científico agnóstico. Y no nos engañemos: El exorcista es definitivamente una película de terror pues su principal preocupación es impactar, asustar y, sí, horrizar a su público. ¿Existe una imagen más perturbadora que la escena del crucifijo? Esta, casi cuatro décadas más tarde, es un testimonio de la visión extraordinaria de Friedkin.
son geniales