El Museo de la Ciudad de México exhibirá a partir del 16 de diciembre la exposición Duffy/Bowie: Five Sessions, compuesta por 42 fotografías icónicas que Brian Duffy le hizo al músico David Bowie a lo largo de su carrera y que permiten conocer su relación de trabajo creativo.
La muestra recoge el trabajo de Duffy a lo largo de cinco sesiones fotográficas con la estrella de rock británico: tres de ellas centradas en carátulas de sus discos, así como otras dos tituladas Thin White Duke y The Lodger.
De acuerdo con un comunicado del museo, en las fotografías, tomadas a lo largo de ocho años, Duffy logró capturar algunas de las imágenes más conocidas de la carrera de Bowie, fallecido en enero de este año, durante un momento en el que ambos «estaban en una de sus etapas más creativas».
Como parte de la muestra se exhibe una de las imágenes más icónicas de Bowie y de la música del siglo XX, la portada del álbum Aladdin Sane, también conocida como La Monalisa del pop, en la que se muestra el rostro del artista adornado con un rayo rojo y azul que atraviesa su rostro.
Durante los años sesenta, Duffy fue uno de los fotógrafos más célebres de Londres, junto con David Bailey y Terence Donovan.
Se dedicó a la moda, el retrato y la publicidad, pero es recordado por sus colaboraciones con Bowie, John Lennon, Sammy Davis Jr., Harold Wilson, Tom Courtenay, William S. Burroughs y Nina Simone.
Sus trabajos «fuera de moldes y convencionalismos», aseguró el museo, se convirtieron en una pieza clave para mirar y recordar a los personajes emblemáticos de la segunda mitad del siglo XX.
Las tres primeras sesiones recogen el trabajo detrás de las portadas de los discos Ziggy Stardust (1972), Aladdin Sane (1973), con la imagen que definió el aspecto de Bowie a lo largo de su carrera, y Scary Monsters (1980), un encargo que Duffy aceptó hacer pese a haberse retirado de la fotografía.
Por otra parte, la sesión Thin White Duke (1975) muestra el momento en el que el Sunday Times Magazine comisionó a Duffy para fotografiar a Bowie en el set de filmación de la película The Man Who Fell To Earth en Nuevo México (EU), en la que hizo el papel de un extraterrestre.
Además, The Lodger (1979) muestra fotografías con las que Bowie pretendía desarrollar la imagen de un «hombre en caída».
El montaje de la muestra, que permanecerá en exhibición hasta el 29 de enero de 2017, es resultado de la colaboración entre la Secretaría de Cultura capitalina y la curaduría del fundador del sello británico BLK MRKT (Black Market), Rene Gelston.L