Dos investigadoras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) crearon una prueba olfativa para detectar signos clínicos de la enfermedad de Alzheimer, con el fin de saber el grado de avance de un paciente para que especialistas médicos puedan tomar medidas al respecto.
La prueba de olores existe en Europa y Estados Unidos, pero no para la población mexicana; ese fue el primer objetivo del proyecto dirigido por la doctora Rosalinda Guevara Guzmán, de la Facultad de Medicina, y la doctora Patricia Severiano, de la de Química.
A decir de la doctora Guevara Guzmán, uno de los primeros rasgos del Alzheimer es la pérdida olfatoria, “pero no se reporta por que se relaciona frecuentemente con la edad avanzada, con algo que tiene que suceder por el paso del tiempo, cuando en realidad no se presenta en todas las personas.
La prueba consiste en pedir a las personas mayores oler las concentraciones de aromas, se les pregunta si las perciben, enseguida que las identifiquen y, por último, distinguen ese aroma entre los demás. También se realiza una prueba de umbral que indica cómo aumenta el grado de reconocimiento al incrementarse la concentración de la sustancia que se les da a oler.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, en el mundo hay casi 20 millones de enfermos del mal de Alzheimer, padecimiento que regularmente se presenta en gente mayor a 65 años, aunque los primeros síntomas se experimentan entre los 40 y 50 años, y en México se estima la afectación en cerca de 500 mil personas, cifra que en menos de 10 años podría triplicarse al considerar el cambio en la pirámide poblacional.